1.000 MILLONES DE CLÁUSULA

Balde, "el héroe de La Verneda", firma el nuevo contrato con el Barça hasta 2028

Balde renueva hasta 2028 con una cláusula de 1.000 millones

Entrevista a Alejandro Balde: "De mi generación solo quedo yo"

Laporta y Balde tras firmar este la renovación hasta 2028 en la ciudad deportiva del Barça en Sant Joan Despí.

Laporta y Balde tras firmar este la renovación hasta 2028 en la ciudad deportiva del Barça en Sant Joan Despí. / EFE / Enric Fontcuberta

Joan Domènech

Joan Domènech

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Alejandro Balde se ha unido al selecto grupo que forman Araujo, Koundé, Pedri, Gavi, Raphinha, Ferran y Ansu Fati. Y también Lamine Yamal, aunque todavía no sea oficial la firma de su renovación. Son los futbolistas del Barça que tienen una cláusula de rescisión de mil millones. Una cláusula tan simbólica del valor que les da el club como inservible e inútil. A no ser el gobierno de Arabia Saudí continúe bombardeando el planeta fútbol redoblando sus millonarias inversiones en un futuro.

Anunciado el acuerdo de renovación de Balde el miércoles, el Barça quiso elevar a la categoría de evento la firma del nuevo contrato que vincula al lateral izquierdo con el equipo azulgrana hasta 2028. Una extensión que solo se ha dado a Marc André ter Stegen, el vicecapitán. Dato que, en este caso, sí describe la valía que tiene el joven jugador para el cuerpo técnico. Xavi cree haber hallado un elemento fiable para unos cuantos años. Como Jordi Alba, su antecesor, que se apropió del carril durante una década y media.

Balde, con la camiseta del Barça y el cartel conmemorativo de su renovación hasta 2028.

Balde, con la camiseta del Barça y el cartel conmemorativo de su renovación hasta 2028. / Valentí Enrich

Salió Balde al campo Tito Vilanova, firmó los folios junto al presidente, también firmó la lona conmemorativa y posó con la camiseta (sin el 3, con el 2028) en la escenografía reservada a los nuevos fichajes y a algunas renovaciones. Como esta, la del "héroe de La Verneda", según dijo Joan Laporta, a quien le había "chivado uno de tu barrio" la popularidad del futbolista, que el año pasado se consagró en la élite, desplazando a Jordi Alba en el Barça y yendo convocado al Mundial de Qatar con España. En los ambientes futbolísticos apodan a Balde, hijo de Saliu Balde, padre bisauguineano, y Gledys Martínez, madre dominicana, como El avión por el poderío físico y su velocidad en sus irrupciones ofensivas.

Rafa Yuste, Joan Laporta, Alejandro Balde y Anderson Luis de Souza, Deco

Rafa Yuste, Joan Laporta, Alejandro Balde y Anderson Luis de Souza, Deco / Valentí Enrich

Balde tiene 19 años, de los que 13 se los ha pasado jugando en el Barça. Vistió antes brevemente la camiseta del Espanyol. Y antes la del Sant Gabriel, la escuela de fútbol más popular del barrio. Ha recorrido, por la edad, todos los escalones del fútbol base. Todos los campos de Sant Joan Despí. Hasta el principal: el Tito Vilanova que estaban pisando y que pisó toda la familia Balde Martínez y todos los asesores del joven, con su agente Jorge Mendes a la cabeza y varios componentes del equipo. "Quiero personificar mi agradecimiento a José Ramón Alesanco [coordinador del fútbol base] en nombre de todas las personas que trabajan en el fútbol formativo", subrayó Laporta cuando amplió el reparto de felicitaciones.

El presidente quiso destacar la predisposición de Alejandro Balde Martínez (Barcelona, 18 de octubre de 2003) en participar en las actividades de la Fundació. Estaba presente en la ciudad deportiva Marta Segú, la máxima responsable de la organización. "Esto dice mucho de tu forma de ser y de tus valores", destacó el presidente, que mencionó la presencia de la abuela del futbolista, llegada de la República Dominicana para disfrutar con toda la familia del acontecimiento.

Joan Laporta y Alejandro Balde, en el acto de renovación del futbolista.

Joan Laporta y Alejandro Balde, en el acto de renovación del futbolista. / Valentí Enrich

Balde habló del largo camino recorrido por él desde que dibujó el sueño de llegar al primer equipo del Barça, de "las horas y el esfuerzo y los sacrifcios realizados", que da por bien empleados, por supuesto. "Espero seguir mejorando, tengo muchas cosas por aprender", expuso, a modo de objetivo personal que se ha propuesto. "Tengo 19 años y cuando acabe el contrato tendré 24", apuntó. Y aún podrá seguir mejorando.