Muere Ferran Olivella, histórico defensa del Barça

Nació en el Poble Sec y jugó siempre en el Barça. Era, en sus inicios, un lateral derecho hasta que se convirtió, ya con el paso del tiempo, en uno de los mejores centrales, protagonista como había sido previamente del ascenso a Primera División del Espanya Industrial, filial azulgrana, en la temporada 1955-56. Siempre fue Ferran Olivella, que ha muerto a la edad de 86 años, según ha informado el club, un jugador precoz, capaz de asomarse al primer equipo, atendiendo la llamada de Domènec Balmanya, conformando las bases de aquel equipo junto a Vergés, Gensana y Coll.

Nada más llegar jugó 49 partidos como titular hasta que años después, ya como central, se hizo con la capitanía, comprometido como estuvo siempre con el club como cuando le dijo al presidente Francesc Miró Sans que estaba dispuesto a rebajarse el sueldo ante la delicada situación económica que había provocado la construcción del nuevo Camp Nou, que fue inaugurado en 1957.

Capitán de la España que ganó la Eurocopa 1964

Capitán fue Olivella también de la selección española que logró la Eurocopa de 1964 en pleno franquismo en un partido cargado de tremenda simbología en el viejo Chamartín madridista. El defensa, con 542 partidos, alcanzó un registro que permaneció durante décadas entre los que más han vestido la camiseta azulgrana, devorado, ahora sí, en el siglo XXI por Xavi, Messi, Busquets e Iniesta, entre otros.

Su impacto en la historia del club va mucho más allá de los títulos (3 Copas de Ferias, 2 Ligas, eran tiempos de escasez, y 4 Copas de España ) porque el Barça era su vida. Desde niño (su padre le llevaba a Les Corts) hasta el último día. Nunca quiso en otro club, a pesar de que recibió ofertas cuando dejó el Camp Nou.

Jugador, directivo, profesor...

No solo fue jugador sino también directivo con Josep Lluís Núñez como presidente (1989-1993), además de ejercer como profesor de educación física en el colegio Viaró de Sant Cugat cuando abandonó el fútbol tras haber sido incluso presidente del Colegio Catalán de entrenadores.

También fue directivo de la Agrupación de exjugadores del Barça y de la Fundación donde intensificó su compromiso más allá del campo. Dentro del césped supo Olivella dignificar la figura del defensa en los complejos años de una inacabable travesía del desierto.

13 temporadas en el Barça, ninguna expulsión

Permaneció 13 temporadas en el primer equipo tras llegar del Poble Sec, el equipo de su barrio, y curtirse más pronto de lo imaginado en el juvenil del Barça antes de asentarse en el primer equipo, donde sobresalió por su categoría, sobriedad y, sobre todo, una excelente colocación.  

Presumía, y con toda la razón del mundo, de que nunca había sido expulsado a pesar de jugar más de 500 partidos con la camiseta del Barça siendo un defensa con personalidad y criterio.