REGRESO ESPERADO

Ansu Fati vuelve a sonreír

El canterano no solo ha heredado el 10 de Messi sino el calvario de lesiones que también sufrió Leo en sus inicios. Más de tres meses después, ha dejado la grada del Camp Nou para regresar al césped.

Roger Pascual

Roger Pascual

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El futuro del Barça pasa por Ansu Fati y Pedri. En el trienio negro del Barça los únicos minutos de ilusión vividos han sido con ellos de protagonistas. El problema es que las lesiones se han cebado con las dos grandes promesas del Barça. Tras el maratón de 76 partidos la pasada temporada con el Barça, la selección española y la olímpica, el centrocampista canario este curso apenas ha podido jugar 22 con la casaca barcelonista. Peor aún le ha ido a Ansu. El canterano no solo ha heredado el 10 de Messi sino el calvario de lesiones que también sufrió Leo en sus inicios y que amenazaban con dar al traste con su prometedora carrera. Mientras Pedri ya ha dicho adiós a este curso, el goleador volvió a pisar el Camp Nou más de tres meses después de la última lesión.

Cuando está sobre el campo demuestra ser especial y tener un romance con el gol (uno cada dos partidos). El problema es que este curso solo había podido disputar 10 duelos, los mismos que en la anterior. Desde su centelleante debut las lesiones le habían hecho perderse 84 choques.

Su martirio empezó en noviembre de 2020, cuando una lesión ante el Betis le llevó a una primera operación para reparar la rotura del menisco interno de la rodilla izquierda. No salió bien y tuvo que pasar tres veces más por el quirófano hasta perderse lo que quedaba de temporada 20-21 y el inicio de la actual. Reapareció el 26 de septiembre pero solo pudo jugar ocho duelos antes de caer de nuevo en Balaídos. Parecía una pesadilla recurrente. Estuvo dos meses parado y, tras volver y marcar en la Supercopa contra el Madrid, recayó en el siguiente choque: en Copa frente al Athletic su pierna izquierda flaqueó de nuevo, en la misma zona en la que recayó en Vigo.

Ovación sonada

Aunque los médicos le recomendaban una quinta operación, que hubiera supuesto perderse lo que quedaba de curso, se negó y apostó por un tratamiento conservador que le permitió volver a jugar un partido oficial más de tres meses después. El Camp Nou, que ya le brindó una sonora ovación al verle calentar en el minuto 66, estalló cuando ocho minutos después entró por Ferran Torres. Una sonrisa se dibujó en su rostro al chocar las manos con Memphis Depay. Quién sabe cómo habría sido la temporada si hubieran coincidido más en el campo.

Ansu Fati entra en el Camp Nou para jugar los minutos finales del Barça-Mallorca.

Ansu Fati entra en el Camp Nou para jugar los minutos finales del Barça-Mallorca. / Jordi Cotrina

Ansu se situó como delantero centro y, aunque no regresó con gol (como había pasado esta temporada ante el Levante, Celta y Madrid), y se le notó la inactividad, no se resintió. "Lo más importante para él es volver a sentirse futbolista", valoró Jordi Cruyff. "Cuando está en forma es capaz de marcar diferencias. Que se ponga en forma lo antes posible". Un deseo compartido por Xavi. "Estoy muy feliz por Ansu. Es una gran noticia para él y para el Barça. Ha hecho un esfuerzo y es un jugador diferencial, especial», comentó el técnico. "Le he probado de nueve porque tiene que estar cerca del área. Volviendo de una lesión le veo más ahí que en banda. Es pieza clave de presente y futuro".

Xavi se mostró satisfecho por haberse levantado tras el «bache generalizado» ante Cádiz y Rayo, pero lamentó que un despiste enturbiara un partido controlado. "Nos complicamos nosotros mismos, tenemos que ser más maduros", apuntó.