LA OPINIÓN DEL ENTRENADOR

Koeman: "No tenemos que cambiar porque el contrario se llame Madrid"

El entrenador del Barça deja en el aire posibles cambios, aunque matiza que serán para potenciar la personalidad del Barça

Piqué y Sergi Roberto reciben el alta y viajan a Madrid, pero el central solo jugará si está al cien por cien

El técnico considera que el hombre clave del duelo será Dembélé por su velocidad y su desborde

Koeman reprocha a Klopp que desprestigiara al Madrid calificando a Valdebebas como "un campo de entrenamiento"

Koeman se abraza con Piqué tras remontar al Sevilla y pasar a la final de la Copa.

Koeman se abraza con Piqué tras remontar al Sevilla y pasar a la final de la Copa. / Jordi Cotrina

Joan Domènech

Joan Domènech

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El clásico no decide la Liga. Hay un tercer elemento llamado Atlético de Madrid que tiene mucho que decir aún, aunque dibuje un declive. A falta de ocho jornadas después para el cierre del campeonato, la victoria solo renovará las posibilidades de seguir luchando para ser campeón. La derrota no implica un descarte automático y quedará apaciguada, rápidamente, por los alicientes que aguarda al perdedor la semana siguiente: el Madrid volará a Liverpool, cultivando el sueño de la Champions, el Barça disputará al final de Copa.

No es un duelo decisivo y eso alivia a los dos entrenadores, con tantos motivos para confiar en su propio equipo como en temer al rival. Una vuelta después, Ronald Koeman sigue pensando que el Barça mereció ganar el duelo del Camp Nou, con lo que no está impresionado con el Madrid, por más que elogió su entidad, a Zinedine Zidane y a los jugadores "impresionantes" que tiene. De nivel parecido al suyo, aunque más veteranos.

Potenciar las virtudes propias

"No tenemos que cambiar porque el contrario se llame Madrid", aseguró, con el punto de indiferencia de haber vivido experiencias anteriores frente al cuadro blanco. En su época de jugador, observó que Johan Cruyff solía introducir retoques en su Barça cada vez que visitaba el Bernabéu. Koeman, ahora entrenador, lo considera comprensible. "Pero no hay que hacer más cambios que en otro partidos, porque tenemos que ser nosotros mismos, pensar en nosotros mismos y en nuestras ideas", explicó. En resumen: "No hay que volverse loco porque sea el clásico y el Madrid".

"No hay que volverse loco porque sea el clásico y el Madrid"

— Ronald Koeman / Entrenador del Barça

Dejó en el aire el técnico azulgrana una hipotética alteración inicial del sistema táctico con los tres centrales, y el posible regreso de Gerard Pîqué. Tratándose de un futbolista "importante y con mucha personalidad", posee opciones de reaparecer pese a su falta de ritmo; en cambio, Koeman generó dudas al subrayar que en un encuentro de esta índole, los once elegidos han de estar al cien por cien de sus condiciones física y psíquicas. "Pero los importantes tienen que estar", dijo a continuación, sin referirse a Piqué. Sino a Ousmane Dembélé.

Dembélé corre eufórico después de anotar el 1-0 sobre el Valladolid.

Dembélé corre eufórico después de anotar el 1-0 sobre el Valladolid. / Jordi Cotrina

El técnico afirma que Piqué solo jugará si está "al cien por cien" y augura un papel "vital" a Dembélé

Incógnitas que no desvelará hasta el último momento, como seguramente hará Zidane. Algún otro asunto quedó claro. Por ejemplo, la crucial influencia que tendrá Dembélé en el partido. "Puede ser vital", afirmó, aludiendo a su velocidad y a su capacidad para desbordar en el regate y explotar los espacios libres en la zaga blanca.

No atribuyó ese papel relevante de Dembélé a las ausencias de Varane y Sergio Ramos porque sus sustitutos. Nacho y Militao, salieron reforzados del encuentro ante el Liverpool. Si el madridismo apela a las bajas, Koeman recordó las suyas; desde Sergi Roberto y Piqué, que recibieron el alta para volar a Madrid, a las de Ansu Fati y Coutinho, ausentes más de media temporada.

Reproche a Klopp

A Koeman le trae sin cuidado que el gran clásico se juegue en Valdebebas, ese "campo de entrenamiento" como lo definió Jürgen Klopp, a quien afeó la falta de respeto al Madrid, ese mensaje de desprestigio implícito. Sí, el entrenador del Barça defendió al Madrid. Y le felicitó por su oportunidad en haber programado las obras del Bernabéu durante la pandemia.

"Lo que es complicado es jugar sin público, pero en cualquier campo", dijo, confiando, incluso en que el césped, "que es lo más importante, estará muy bien". Cree Koeman, también, que el nuevo árbitro designado, Jesús Gil Manzano, "es muy buen árbitro, es honesto y, además, tendrá la ayuda del VAR".