Setién perfila un "plan" para seguir la racha en el Bernabéu

Llega Quique Setién a su primer Clásico con un expediente rico en precedentes prometedores: en sus cuatro visitas al Santiago Bernabéu como entrenador, el cántabro ha arrancado dos victorias (las dos con el Betis) y un empate (con la UD Las Palmas, en un partido que el equipo canario ganaba por 1-3 en el minuto 86). El técnico azulgrana sabe, pues, cómo hacerle daño al Real Madrid en su campo. Y sus jugadores, también, como atestiguan los cuatro triunfos ligueros del FC Barcelona en Chamartín en las cuatro últimas temporadas. Y aunque Setién sostiene que “en estos partidos, el pasado no cuenta”, tampoco oculta que dar continuidad a la reciente hegemonía barcelonista en la Casa Blanca es un reto que le estimula de manera muy particular: “La verdad es que me haría muchísima ilusión ganar este Clásico y continuar la racha extraordinaria que lleva el club y la que llevo yo, pero la realidad es bastante más complicada que las ilusiones”.

En realidad, prolongar esa racha ganadora en el Bernabéu no es la principal motivación del cuadro azulgrana, que sabe que una victoria supondría dar un importante golpe de autoridad de cara a la conquista de la Liga 2019-20 y dejaría, de paso, muy tocado a su principal rival. “Nos daría una ventaja importante, aunque no suficiente" para dar por cerrado el campeonato, apuntó Setién. Ciertamente, cinco puntos de renta a falta todavía de 12 jornadas no parecen garantía de nada, pero sí pueden suponer un peso anímico considerable para un equipo que, como el Madrid, viene de tres malos resultados consecutivos. "No me fío nada de las dinámicas, y menos en un partido como este", señaló el entrenador del Barça, que sí admitió que el conjunto blanco llega a la cita con una urgencia mayor. "Para ellos es un partido vital, sí, seguramente mucho más que para nosotros, por la ventaja que podría quedar si ganamos. Pero yo no me fío de nada".

Si yo fuera Setién...

Valentía para ir a por el partido

En el encuentro con la prensa previo al duelo de esta noche, el santanderino señaló que espera un choque "muy disputado, con alternativas, igualado", en el que su equipo, explicó, "tratará de ser atrevido, de tener el control del juego y de ir a por el partido", pero advirtió de que el Madrid en ningún caso se conformará con un papel "contemplativo": "Nos van a apretar desde el inicio y vamos a tener que andar muy finos para superar su presión".

Además de la inclusión o no de Jordi Alba en el equipo inicial (“las sensaciones son positivas, pero habrá que ver cómo está mañana para decidir con él si sale de inicio"), el técnico dijo tener "alguna duda más" respecto al once. La presencia de Gerard Piqué no es una de ellas, puesto que el central, indicó, ha superado las molestias en el tobillo que le obligaron a retirarse antes de tiempo en el duelo de Champions con el Nápoles y "no va a tener ningún problema". Menos clara es la composición del trío de ataque, donde Arturo Vidal, Martin Braithwaite y Ansu Fati se disputan una plaza para acompañar a Messi y Griezmann. "Todos los futbolistas que tenemos están preparados para jugar de salida", aseguró el técnico.

Collado, sí; Riqui Puig, no

La recuperación de Jordi Alba y la llegada de Braithwaite han dado un respiro a Setién a la hora de confeccionar esta vez la lista de convocados, en la que, además de Ansu, solo asoma otro jugador con ficha del filial, Álex Collado, que ha vuelto a pasar por delante de Riqui Puig. A falta de cerrar la alineación titular, el entrenador tiene bastante perfilado "el plan" con el que hará frente al Madrid, una apuesta que se ha visto enriquecida por las conclusiones que pudo extraer de la victoria del Manchester City en el Bernabéu el pasado miércoles.

Setién, que, junto a Éder Sarabia, presenció ese partido desde un palco privado en el Bernabéu, estuvo hablando con Pep Guardiola después del encuentro, aunque ayer no quiso dar detalles sobre el contenido de esa conversación. "Fuimos a ver el partido, no a ver a Guardiola. Vimos el plan que él diseñó con un equipo que es similar al nuestro en cuanto a conceptos. Luego sí tuvimos la oportunidad de hablar un rato, pero del partido hablamos poco. Hay cosas de las que pudo hacer el City ese día que nos pueden venir bien y otras que nosotros no podemos hacer o que no nos interesan", comentó.