Joao Félix, el menino que no despega

No se separa Simeone del menino. Lo tutela lo más cerca posible, consciente de que el futuro del Atlético radica en Joao Félix, ese joven talento portugués que acaba de cumplir 20 años, a quien le destinaron la descomunal misión de llenar el inmenso vacío que dejó Antoine Griezmann con su tumultuosa marcha al Camp Nou. No se despega el Cholo de ese menino de oro, como le conocían en Portugal, donde asombró con su centelleante paso por el Benfica.

Si a Griezmann, todo un campeón del mundo, le cuesta encajar en el Barça, ¿cómo no lo va a sufrir el joven portugués?

"Está mejor", dijo el técnico rojiblanco. "Mejoró en Turín, seguro que arrancará de inicio y ya veremos si juega en banda o acompañando en ataque a Morata", afirmó Simeone, que ha supervisado desde el inicio el complejo aterrizaje del dúctil delantero portugués en el Metropolitano. Si a Griezmann, en plena madurez deportiva siendo como es campeón del mundo con Francia y con estadísticas impresionantes en su lustro colchonero, le está costando mucho encajar en la piel del Barça, ¿cómo no va sufrir alguien como Joao?

Asunto de club

Y no será, sin embargo, porque Simeone haya ido con prisas. Al revés. Consciente de la responsabilidad a la que se enfrenta el menino, ha escogido la vía de la paciencia. Tanto en el campo de entrenamiento como en los estadios, a pesar de que en Granada se desgañitara dándole órdenes tácticas que el exjugador del Benfica no entendía. O quizá no quería oir.

A Simeone se le llevaban los demonios en el Nuevo Los Cármenes porque le pedía que se fuera a la banda derecha, mientras él, acostumbrado a ser un electrón libre en el ataque del Benfica, se movía por el centro de la delantera rojiblanca. Aunque lo pudiera parecer, el técnico no desespera, asumiendo que no es solo un asunto deportivo sino, en realidad, un asunto de club.

"Es un chico que necesitamos porque es un futbolista diferente" (Simeone)

Todo el dinero que recibió el Atlético por Griezmann (los 120 millones de euros que fijaba su cláusula más una propina otoñal de 15)  lo acabó invirtiendo en Joao Félix. Tuvo que abrir su caja llena para darle 127 millones y arrebatárselo al Benfica. Aquellos 15 goles en sus 26 partidos en la Liga portuguesa abrieron el apetito de los grandes clubs europeos. Y el Atlético, muy a su pesar, tuvo que pagar precio de Antoine por Joao. "Hace poquito que está con nosotros", le disculpó Simeone este misma semana.

Estuvo 35 días de baja

Lleva poco tiempo y, además, ha estado 35 días de baja. "Desgraciadamente se ha lesionado y ha estado un mes fuera", dijo el técnico recordando ese inoportuno esguince en el tobillo derecho que sufrió ante el Valencia y le  envió a la enfermería. "Pero es un chico que necesitamos porque es un futbolista diferente con un juego que no tenemos dentro del plantel", admitió el Cholo, quien ha visto todavía pocas cosas del menino.

Con la lesión de Diego Costa, el Atlético pierde gol y suplica para que el exdelantero del Benfica explote lo antes posible

Joao Félix ha jugado 13 de los 19 partidos, dejando tres goles (dos en septiembre y uno en octubre), pero solo ha regalado una asistencia. No ha tenido continuidad (solo ha jugado el 51 % de los minutos posibles esta temporada) ni el brillo que se pensaba. Tanto lo ha mimado Simeone que solo ha completado dos de esos 19 choques.

De ahí que el técnico le suplicara en Granada que le hiciera caso. No es ninguna exageración porque el técnico juntó desesperadamente sus manos desde la banda para que aprenda lo antes posible el catecismo cholista. Con la lesión de Diego Costa, el Atlético ha perdido contundencia ofensiva. No tiene gol. Solo lleva 16 tantos en 14 jornadas de Liga, una cifra verdaderamente irrisoria. Por eso, necesita tanto al menino.