Esta startup ha creado un dispensador de medicinas inteligente para personas mayores

En estos momentos en los que estamos en cuarentena nuestros mayores y su salud son una de nuestras prioridades y mayores preocupaciones, debido a que la letalidad del coronavirus es bastante mayor en personas de la Tercera Edad.

Pero ¿cómo asegurarnos no solo de que estén bien mientras permanecen en casa, sino que también estén tomando la medicación que les corresponde habitualmente en su día a día? Una startup española llamada Berdac ha creado IMA, un dispositivo que soluciona el problema.

Se trata de un gadget que pretende mejorar el seguimiento del tratamiento farmacológico mediante tres elementos. Tiene un dispensador que puede ser usado por el mayor o el paciente de forma muy sencilla, solo requiriendo un botón para hacerlo funcionar. Este cuenta en su interior con un pastillero que cubre una semana de medicación (28 tomas, 4 al día) y que puede ser rellenado por un cuidador, la propia farmacia o el paciente si aprende a ello. 

El aparato estaría conectado con una plataforma capaz de monitorizar “la adherencia terapéutica del usuario”. Este software también contendría su plan de medicación y es capaz de enviar notificaciones si se produce cualquier imprevisto.

“El portal y la app no están pensadas para que los utilice forzosamente el usuario, su gestión la puede realizar un cuidador o el propio farmacéutico. Están pensadas para que sean lo más sencillas de uso posible y, únicamente, hará falta acceder a ambos si hay cambios en el plan de medicación. Nuestra intención es que si el usuario es una persona mayor solo tenga que preocuparse de apretar el botón cuando la maquina lo solicite”, explica para BYZness Mateo Gil, responsable de comunicación y marketing de Berdac.

IMA viene con una batería integrada que puede alcanzar las 72 horas de duración. No es necesario que los mayores tengan Internet instalado en casa para usarlo, porque el dispositivo no necesita WiFi. Con una tarjeta SIM puede conectarse online allá donde se lleve. Su forma vertical y estanca se debe a que desde la compañía querían que fuera “completamente seguro y estéticamente atractivo como para tenerlo en la cocina junto a otros electrodomésticos más habituales”. 

Gil quiere dejar claro que su producto tiene una importante diferencia respecto a los pastilleros electrónicos normales: “Estos no hacen un seguimiento en tiempo real. Habitualmente son simplemente unos sistemas de alarma, que suenan cuando toca. IMA no solo provee de un sistema de alarmas, sino que valida que el usuario ha apretado el botón y retirado el vaso. Así aseguramos que el usuario se tome la medicación al momento”. 

Origen y financiación

La startup cuenta con un año de vida. La idea le vino al fundador y CEO de la compañía por una necesidad personal. “Tras diagnosticar de Alzheimer a su madre, Roger Guasch vio que no existía una solución eficaz para la gestión de la medicación. Comprendió que esta preocupación era muy común en muchas personas que tienen un familiar mayor. Tras mucho tiempo investigando decidió constituir la empresa, creando así un proyecto de impacto social al mejorar la salud de las personas polimedicadas”, señala Gil. 

Hasta la fecha la compañía ha obtenido 450.000 euros de fondos a través de una ronda de financiación de capital semilla que cerraron el pasado mes de noviembre. En ella participaron ENISA, Equity4Good miembros de ESADE BAN, miembros de Economistes BAN, y algunos business angels a título individual.

Según comenta Gil, están en conversaciones con posibles clientes como agencias de seguros médicos, servicios de teleasistencia, servicios de atención a domicilio o de ensayos clínicos. Estos potenciales partners les han trasladado que “no hay ningún sistema de seguimiento similar en el mercado de algo tan esencial como la medicación”. 

La firma asegura que la crisis del coronavirus le ha afectado antes incluso de llegar a España y decretarse el estado de alarma. De hecho, ha ocasionado que se queden sin existencias desde hace semanas. “Al producir en China, la fabricación de nuestras primeras 2.000 unidades ha sufrido un retraso importante. Sin embargo, ya se ha vuelto a iniciar la producción, y no debería volver a parar”, comenta el responsable de marketing. Según afirma, a mediados de año se podrá volver a comprar. 

Una vez validado el modelo en España Berdac y dar servicio al mayor número de usuarios posibles- lanzando una producción mayor antes de finales de año-, su objetivo es aterrizar en los países europeos cercanos y en EE.UU en 2021. Con este propósito esperan abrir una nueva ronda de financiación próximamente. 

El precio del dispositivo es de 199 euros más otros 15 euros que cuesta el pack de 4 pastilleros, que cubre una semana cada uno. Esta cantidad incluiría también el acceso al portal de monitorización, la conexión del dispensador y el rellenado de cada pastillero si se realiza en una de las farmacias de su red.