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Cómo invertir en metales: guía para saber todas las alternativas

El mundo de la inversión nunca se para, a pesar de la volatilidad o de episodios que pueden perjudicar a nuestro patrimonio. Y mientras muchos se atreven con la bolsa o los bonos, otros buscan refugios clásicos como el oro u otros metales. ¿Cómo invertir en ellos?

El mundo de la inversión nunca se para, a pesar de la volatilidad o de episodios que pueden perjudicar a nuestro patrimonio. Y mientras muchos se atreven con la bolsa o los bonos, otros buscan refugios clásicos como el oro u otros metales

Oro

Oro / economia

Héctor Chamizo

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Hay que saber distinguir, en primer lugar, entre los metales preciosos e industriales. Los primeros de todos suelen actuar como activos con los que protegerse ante episodios tan negros como las recesiones. “Los metales preciosos, como el oro, la plata o el platino, siempre sirven para cubrirse en periodos de crisis económicas, pero también es interesante invertir en ellos en otras etapas”, resalta José Luis Herrera, analista independiente.

“Pueden servir como un instrumento eficaz para reducir su nivel de riesgo y volatilidad, ya que casi no tienen correlación con otros activos comerciales”, dice el analista. “En tiempos de inestabilidad política, como en el caso de la incertidumbre del Brexit, o los desórdenes financieros extremos en Venezuela y Zimbabwe, activos como el oro o la plata pueden proteger nuestro dinero”, añade.

Por su parte, los metales industriales, como pueden ser el cobre, el mineral de hierro o el zinc, pueden tener un comportamiento positivo en los mercados dependiendo de otros muchos factores macro y particulares. “Desde las políticas monetarias de los bancos centrales, a la producción de estos recursos en los países, hasta la situación en cuanto a las exportaciones e importaciones”, analiza José Luis Cárpatos, director de inversiones de Gloversia Eafi. No se califican como activo refugio como tal. 

Una vez que tenemos sobre el tablero en qué consisten estas dos clases de metales, muchos inversores o futuros operadores, se plantean la cuestión sobre cómo se puede invertir en estos activos: qué alternativas hay y cuáles pueden ser las más recomendables. Eso sí, hay que considerar siempre que este tipo de inversiones no garantiza ningún rendimiento y que están sujetas a cambios constantes por la cotización de los mercados. 

La compra física, en el caso de los metales preciosos

Efectivamente, no todos los metales son iguales. En el caso de los preciosos, una de las posibilidades es la compra física de lingotes: “Esto es válido para oro, plata, platino o paladio, por ejemplo”, describe Cárpatos. 

¿Cómo se puede hacer? Es necesario recurrir a compañías que están especializadas a hacer transacciones con lingotes, monedas o joyas. “Sobre todo, en el ámbito del inversor hay que conocer que la empresa esté registrada legalmente, con todas las garantías, y que tengan las comisiones más bajas posibles”, comenta Herrera. 

En el caso de los lingotes hay que tener en cuenta tres factores fundamentales: La pureza del lingote, que tiene que ser del 99,9% al ser posible; que tenga un certificado internacional en el metal; y que expidan una factura de compra para posibles reclamaciones que podamos hacer en el futuro, junto con el certificado de compra. 

Invertir a través de fondos de inversión

Hay algunas categorías de fondos de inversión que se dedican exclusivamente a invertir en metales: tanto preciosos como industriales. Es una buena opción desde el punto de vista de la inversión. 

Algunos de ellos están orientados a activos de oro, mientras que otros productos se centran en más commodities. “Lo normal es que estos vehículos se centren en compañías mineras, productores y un largo etcétera”, afirma Cárpatos. Un ejemplo se puede ver en vehículos de inversión como Schroder ISF Global Gold o el Franklin Gold & Precious Metals Fund. Para ello, lo único que se necesita es tener una cuenta de inversiones en tu propio banco o en un bróker online.

Para aquellos que son menos avezados que quieren depositar su dinero en metales, la posibilidad de los fondos es una opción a tener en cuenta. Eso sí, resulta conveniente leer bien el folleto del producto para ver cómo está posicionado y las comisiones que nos van a aplicar como clientes. 

Optar por otras alternativas como futuros o ETFs

Dentro de los productos más avanzados a través de los que se puede invertir en metales de todo tipo están los contratos de futuros, los contratos por diferencias (CFDs) y las inversiones mediante ETFs. Todos, invierten directamente estas materias primas.

Para acceder a este tipo de productos se necesita tener una cuenta en un bróker online. “Hay muchas posibilidades en el mercado y hay que centrarse en la gama de productos y en las comisiones que aplica”, cuenta Herrera. El matiz en el que se centran los expertos es que son unas opciones recomendadas para inversores más experimentados.

Por ejemplo, los contratos de futuros son productos financieros complejos y la negociación de los mismos es muy reducida en España en el segmento de los metales preciosos. “Los costes de gestión son más elevados con respecto a otros vehículos en España”, asegura Cárpatos. 

Por su parte, los CFDs arrastran una clase de riesgos que solo un trader o inversor profesional es capaz de manejar: “Tienen que ver con la multiplicación de valores y al apalancamiento en el que se opera, porque el capital que hemos empleado puede terminar esfumándose”, alerta Herrera.

Por último, la alternativa de los ETF sí es una buena posibilidad. Este vehículo es un fondo de inversión que cotiza en los mercados y que generalmente replica una serie de activos o índices. “En el caso del oro, por ejemplo, empresas vinculadas al metal precioso”, ejemplifica Cárpatos. Este tipo de productos también se puede adquirir a través del banco o de un bróker online.