Edwin Winkels, el hombre tranquilo vuelve a la Barceloneta

Edwin Winkels (Utrecht, 1962) rescata la Barcelona previa a los Juegos del 92, tan añorada por los mismos que hoy lamentan vivir en un parque temático del turismo fuera de control. 'El año que desapareció la arena' es una novela entretenida, bien estructurada (con la ciudad como bisagra narrativa), cargada de humor y con un final abierto que invita a seguir extrayendo adoquines en busca de la playa.

La Barceloneta de 1991 es el escenario de esta obra concebida en holandés bajo el título 'Xiringuito' y traducida al castellano por el propio autor, aunque la conversión a 'El año que desapareció la arena' es culpa de la editorial. Como si el chiringuito de Georgie Dann se conociera más en la patria de Johan Cruyff.

Banda musical

Si hubiera que elegir banda musical, 'Mediterráneo' de Los Rebeldes. O La 'Rumba de Barcelona' de Manu Chao. La guitarra del legendario Bernardo también serviría al lector como melodía (y matraca) mientras averigua qué le sucede a la familia propietaria de uno de los merenderos de la playa de Sant Miquel desde el día en que recibe una carta que comunica que será derruido como el resto de los chiringuitos afectados por la ley de costas y los Juegos Olímpicos.

Nunca ha olvidado el primer paisaje que conoció de esta ciudad. Las barracas de La Perona, una mañana de 1980 en la que el tren de París atracaba en Barcelona Término

¿Un final abierto para 'El año que desapareció la arena'? Las sirenas de la Copa América resuenan en la Barceloneta del 2024, "la de las colas del TikTok que nos desbordan de turistas", dice el escritor que nunca ha olvidado el primer paisaje que conoció de esta ciudad. Las barracas de La Perona, una mañana de 1980 en la que el tren de París atracaba en Barcelona Término. De cuando se vivía de espaldas al mar, otra estafa del márketing olímpico.

Regreso a otro ayer

El juego literario de Winkels tiene algo de regreso a otro ayer, a un qué hubiera pasado si no hubiera pasado lo que pasó. Antes, hay que buscar una librería (en el barrio de los pescadores y los 'quarts de casa' cerró la única que quedaba) y comprar 'El año que desapareció la arena'. 

Al bucear en su libro, aquellos reportajes directos y vivos que daban la voz a gente anónima o a enormes figuras del deporte como Miguel Induráin

El Winkels escritor de novelas ('Xiringuito' es la quinta publicada en los Países Bajos, la segunda en España) no ha abandonado para nada al Winkels periodista. Quienes tuvimos la suerte de seguirlo durante 20 años en 'El Periódico de Catalunya' recordamos, al bucear en su libro, aquellos reportajes directos y vivos que daban la voz a gente anónima o a enormes figuras del deporte como Miguel Induráin. Al campeón navarro lo retrató con un titular redondo en una portada del 'Dominical', 'El hombre tranquilo'. Definición que podría lucir en su tarjeta de visita de reportero múltiple. Winkels, el hombre tranquilo que dejó con el cabreo en la boca a Louis van Gaal, el que escribía de todo para "aprender así de todo", el que cambió de rumbo profesional cansado de jefes, el que no pierde la sonrisa amable ni la mirada vigilante.

En los Países Bajos lo disfrutan en el diario digital y en papel 'Algemeen Dagblad' y la televisión pública NOS. Por estas latitudes lo reivindicamos con su última novela. 

'El año que desapareció la arena'

Autor: Edwin Winkels 

Roca Editorial

296 páginas. 20,90 euros