El sudoku presupuestario de Junqueras

"Lo bello del desierto es que en algún lugar esconde un pozo", escribía Antoine de Saint-Exupéry en 'El principito'. En la semana de Sant Jordi, Junts pel Sí se aferra a esta máxima para encontrar la forma de cuadrar el sudoku presupuestario. Con las arcas más secas que el desierto del Sáhara, Oriol Junqueras busca gasolina para reflotar la avioneta catalana. Mientras la CUP sigue con la mirada fija en el asteroide B-612, la independencia, con la desobediencia por bandera, el Govern continúa mirando de reojo a los otros partidos de izquierda para intentar firmar las cuentas.  

“Solo hay que pedir a cada uno lo que cada uno puede dar”, le dice el rey al principito en el libro. Junqueras sabe que no puede pedirle al PSC y a Sí que es Pot que avalen su hoja de ruta independentista, pero sí que puede intentar perfilar para el 2016 unos presupuestos de corte más social, sin tener que entrar, de momento, en las arenas movedizas de la desobediencia. La primera ocasión de acercamiento la tendrán este jueves en el pleno del Parlament, que debatirá dos mociones del PSC y Sí que es Pot, que instan a presentar un proyecto de presupuestos de marcado perfil social antes de un mes.  

Puigdemont cumple 100 días en el Govern esperando los presupuestos

"El Power Point lo aguanta todo, pero también hay que hacer un Excel con los presupuestos, que aún no sabemos cuando presentarán. La CUP habla de 'desobediencia', pero no parece que la palabra guste a Junts pel Sí y nos gustaría saber cómo piensan aprobar los Presupuestos", ha preguntado Eva Granados, portavoz del PSC. En las últimas semanas JxSí ha mantenido conversaciones informales con socialistas y la coalición de izquierdas en las que les ha mandado señales de estar dispuestos llegar a un entente. Lluís Rabell se pregunta si estos "guiños" son "honestos" y "cómo se concretan". Aunque reconocen el complejo escenario de las cuentas, Sí que Es Pot y PSC consideran que hay margen de maniobra para priorizar las políticas sociales y de reactivación económica. Para ello, sus mociones coinciden en varias medidas para mejorar los ingresos, como por ejemplo reformar y aumentar el impuesto de sucesiones, así como en la reclamación de que se negocie con el Estado flexibilizar los objetivos de déficit, haciendo frente común con otras comunidades. Junqueras gravita entre la necesidad económica de acercarse a la órbita de España y el planeta desobediencia de la CUP. "Si el Govern quiere revertir los recortes debe saber que esto implicará desobedecer al Estado", advierte Albert Botran, portavoz anticapitalista.