HOY JUEGAS

'Bernabéu' en el Phenomena

Un fotograma del documental 'Bernabéu'

Un fotograma del documental 'Bernabéu'

Julián García

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El 8 de noviembre, se estrenó en una docena de ciudades de España el documental ‘Bernabéu’, hagiografía del que fuera presidente del Real Madrid entre 1943 y 1978. Este retrato del gran patriarca blanco podía tener su interés para los madridistas de médula pero, pasados dos meses desde su estreno, las cifras certifican que ha sido un descalabro a la altura de la primera vuelta del Madrid de Zidane: menos de 500 espectadores y poco más de 3.000 euros recaudados, según datos del Ministerio de Cultura a fecha de 31 de diciembre del 2017.

A pesar de la abundante parroquia madridista en Catalunya, el documental no se estrenó en noviembre en nuestros cines. En declaraciones a ‘Libertad Digital’, su director, Ignacio Salazar-Simpson, puso el grito en el cielo porque los cines Verdi se negaron, según él, a proyectar el documental. "Me dijeron que en Gràcia no hay madridistas. Un horror. Autocensurándose no sé por qué", clamó el director. Los responsables de los Verdi desmintieron tal hecho y alegaron, encogiendo los hombros, que "no había hueco en la programación para esos días porque ya había otros estrenos comprometidos".

La proyección del documental sobre el expresidente del Real Madrid fue, quizá, la sesión más rara de la historia de un cine acostumbrado de por sí al cine raro  

Al final, y contra todo pronóstico, 'Bernabéu' sí ha podido verse en Catalunya. De forma insólita, por todo lo grande, proyectado en la mejor pantalla de Barcelona, la del Phenomena, el fabuloso cine de la calle de Sant Antoni Maria Claret, templo de la feligresía del cine de género con su Dolby Atmos, sus cortinas rojas, su vestíbulo ‘à l’ancienne’ y su marquesina iluminada. El evento tuvo lugar el sábado 13 a las 11.45 horas, justo antes del pase de ‘Insidious: La última llave’ y del gran programa doble formado por 'Conan, el destructor' y 'Krull'’, en la, quizá, más extraña proyección de la historia de un cine acostumbrado de por sí al cine raro. Por lo visto, fue el propio Salazar-Simpson quien alquiló la sala tras enterarse de que algunos de los miembros de la Federación de Peñas Madridistas de Catalunya (FEPEMAC) tenían previsto viajar en romería a Zaragoza para ver la vida y obra de Santiago Bernabéu. Una exaltación blanca que a Tomás Roncero le habría hecho estremecer.