Los pisos vacíos de los bancos deben poder alquilarse

Hagamos memoria: 40.000 millones de euros nos dejaron de Europa para rescatar el sector bancario hace más de un año. Entonces se dijo y se repitió, desde el Gobierno, que de ninguna manera ese dinero lo acabaría pagando la población, sino que sería la Sareb, el llamado banco malo que entonces se creó, la que podría vender los activos tóxicos de la banca nacionalizada, y con el dinero de la venta se podría devolver el préstamo. De momento, esto no ha pasado y lo que sí está claro es que los intereses que se deben pagar por el crédito recibido afectan directamente el déficit español.

Es cierto también que si nos fijamos con detalle, no deberíamos poner todas las entidades financieras en el mismo saco. En Catalunya tenemos al menos dos buenos ejemplos que trabajan bien.

Ayer, en 'el Suplement' de Catalunya Ràdio, la líder de la Plataforma d'Afectats per la Hipoteca recordaba que Catalunya lidera la lista de ejecuciones hipotecarias y de desahucios, y exigía que los ayuntamientos presionen con multas las entidades financieras para conseguir que pongan los pisos que tienen vacíos en alquiler social, tal como ya ha hecho el ayuntamiento de Terrassa. E iba más allá: reclamaba que sea la Generalitat la que impulse y armonice esta acción, como prevé la ley catalana.

Será positivo que desde el Govern, con las entidades locales y las entidades financieras, se concreten los criterios de estas acciones para los bancos y para las familias, para que no pueda haber ni engaños ni abusos por ningún lado, y para que esta nueva acción no la acabe pagando el conjunto de la población.

Pediremos hoy al secretari de Vivenda del Govern, Carles Sala, qué responsabilidad asumirá el Govern.

Pisos vacíos y familias que lo necesitan. Entidades financieras que no quieren perder ... y todos que debemos saber ganar.