'Black death' viaja a la edad media de la peste bubónica

La peste negra o peste bubónica fue una devastadora pandemia que diezmó la población europea a mediados del siglo XIV. No menos cruenta fue la acción de la Iglesia durante aquellos años oscuros, pavorosos, según nos relata el director británico Christopher Smit (Creep) en su películaBlack death, presentada ayer en Sitges en la sección oficial a competición. El filme relata el viaje de un violento grupo de soldados de la Iglesia y de un novicio en busca de un supuesto nigromante con poderes para ahuyentar la peste negra. Sin ser una película que quite el hipo,Black deathatrae y entretiene, que no es poco a estas alturas de festival, y sabe transmitir ese mugriento hedor a sangre y muerte tan propio del género medieval. También nos recupera la grata presencia de la actriz holandesa Carice van Houten, la carismática protagonista deEl libro negro,de Paul Verhoeven, y solo por eso, diablos, ya merecería la pena verla.

En la sección oficial a competición también pudo verse ayer13 assassins, o la supuesta domesticación del prolífico, y muy delirante, cineasta japonés Takashi Miike, autor de las radicalesAudition, Ichi the KilleroDead or alive.Esta película de samuráis, una especie de12 del patíbulo a la japonesa, es, posiblemente, la más contenida y, digamos, clásica de la carrera de Miike. Aun así, ojito con él: su última secuencia es una extenuante batalla que dura 45 minutos y que enfrenta a los héroes del relato con un ejército de más de 200 hombres.