Sombra aquí, sombra allá

Aseados, bien vestidos y, ahora también, llegar a la tele habiéndose maquillado en casa. Esa es la premisa anunciada por TV-3 –y aplicada desde este miércoles–para sus colaboradores semanales en programas que incluyen tertulias como 'Els matins' o 'Divendres', o secciones presentadas por expertos que, a partir de ahora, según se informó en una nota interna de la tele autonómica, no contarán con la asistencia del servicio de maquillaje y peluquería de la casa, sino que tendrán que llegar a la tele habiéndose acicalado en sus hogares, a punto ya para entrar en el plató.

«Caracterizarme yo de alguno de mis personajes, sí que sé, pero ¿maquillarme? Yo no me maquillo nunca, no sé hacerlo. Si lo hago, puedo llegar a la tele como una pepona con coloretes. Puedo quedar monísimo, si lo intento», reflexiona el humorista Fermí Fernández, invitado habitual en la tertulia de 'La Riera', los viernes, en el programa 'Divendres',  magacín que presentan Xavier Coral y Espartac Peran. «¿De verdad pretenden ahorrar sin esos seis minutos, o menos, que tardan en ponerme cuatro polvos, en el buen sentido de la palabra, una vez a la semana?», cuestiona Fernández.

«¿Aparecerán unas personas bien maquilladas, sin brillos ni sombras extrañas, y otras mostrándonos tal como somos, con las arrugas que tenemos? –añade el cómico–. Entiendo que se tengan que aplicar recortes, pero me gustaría que alguien me explicase si esta ridícula medida de esos pocos minutos no es absurda. Me parecen golpes de palo de ciego para ahorrar».

«Considero que se trata de un menosprecio al alto nivel de profesionalidad del personal del servicio, que conozco y valoro desde hace muchos años, ya que, evidentemente, quienes nos maquillemos en casa no estaremos a la altura de los estándares que hasta ahora exhibía en este tema TV-3, lo que me parece una pérdida», puntualiza el también tertuliano de 'Divendres' Antonio Franco. «Habitualmente, he llegado a TV-3 peinado y arreglado desde mi propio domicilio, pero a partir de una técnica completamente amateur –dice Franco–. Puedo entender los problemas presupuestarios, porque conozco la situación de los medios, pero no puedo dejar de lamentar que al fijar prioridades en el gasto se incida desfavorablemente en una cuestión que condiciona directamente la calidad de la imagen que se traslada a los espectadores».

Tampoco entiende la solución adoptada otra colaboradora de 'Divendres' afectada, Marina Llansana, que ayer ya fue convocada más tarde a la tele, puesto que debía ya venir, como se le indicó con antelación, maquillada. «Creo que esta decisión perjudica no solo a nuestra imagen personal, sino también al conjunto de la cadena. Y me parece una medida injusta porque afecta especialmente a las mujeres. A los hombres les da igual, vendrán de casa como vienen siempre, pero a nosotras nos supone una inversión añadida, de tiempo y dinero, ya que nos exigen un maquillaje profesional y un peinado de peluquería», precisa Llansana.

En el comunicado de TV-3 se especificaba que, «especialmente en el caso de las mujeres», deberían ir a la tele «maquilladas, peinadas y vestidas», siguiendo las normas que establezcan las direcciones de los espacios en los que colaboran.  Fuentes oficiales de la tele autonómica insistieron ayer en que se trata de una medida coyuntural y, por tanto, temporal.