tú y yo somos tres

El 'pilar' de la familia

FERRAN MONEGAL

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Nos quedaba por comentar el viaje deAlbert Oma la finca de Cadaqués de los Rahola (El convidat, TV-3). Ha sido una inmersión interesante. Más que para conocer mejor aPilar Rahola -criatura que debido a su fantástica y continuada exposición mediática es casi como de la familia de todos los teleadictos- el ejercicio ha servido para adentrarnos en su entorno existencial. Al margen de que ella parece ser, en efecto, el auténticopilar del paisaje humano que la circunda, en casa nos ha atraído poderosamente la figura de su padre. Mientras su madre, su esposo,Roberto, y sobre todo ella misma son portentosos paradigmas de la extroversión más absoluta, locuaces, dicharacheros y explosivamente comunicativos, a su padre le vimos siempre inmerso en un apasionante quietismo. Sentado en un extremo del salón, le observamos primero desayunando, a su bola, y luego haciendo crucigramas, tranquilamente, ajeno al tráfico que a su alrededor sucedía, instalado en un recogimiento interior muy bonito.Om se le acercó un momento y le preguntó:«¿Usted es el padre de Pilar verdad?», y él, sin apenas quebrar su reposo, contestó:«Supongo». ¡Ahhh!Omensayó entonces una segunda aproximación. Le dijo. «Ya, ya me han dicho que usted no habla mucho». O sea, como intentando entablar una conversación. Pero el padre dePilar levantó entonces la vista, miró al visitante, y respondió: «Val més callar». Y punto. No volvimos a escuchar su voz en todo el fin de semana. ¡Ah!, el padre dePilarnos ha parecido un hombre de una colosal y sabia lucidez. Frente a las tremendas fuerzas de la naturaleza que por la casa cabalgaban, frente a unRobertoy unaPilarque le confesaban aOmque su pasión es tan magnífica que ya llevan rotas tres camas de matrimonio, tres tálamos nupciales hechos fosfatina -tema que sirvió a los de Polòniapara construir un gag divertidísimo- frente a esta furia desatada, el padre daba ejemplo de prudencia encerrándose en sí mismo.

Celebro, francamente, que en TV-3 le hayan dedicado aPilaruna gloriosa semana deagitprop tan cumplida (El convidat+Polònia). Después del último artículo dePilar sobreMònica Terribas, acusándola de mártir, de líder de trinchera y de nuevaJuana de Arco, reconforta que en nuestra gran televisión pública no se practique el sectarismo que en otros lugares abunda. Ni listas negras. Ni la venganza del silencio. Ni la canalla condena del ninguneo.