CAMPAÑA ESTIVAL EN CATALUNYA

Verano de alto riesgo en los bosques catalanes

Espadaler anuncia la convocatoria de más plazas de bombero funcionario y voluntario, pero a partir de septiembre

ANTONIO MADRIDEJOS / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

A falta de un mes para que empiece el verano, los bosques de buena parte de Catalunya se encuentran ya en alerta debido a las escasas lluvias de los últimos meses y, de no cambiar la situación, la campaña de incendios puede ser este año particularmente difícil, incluso con algún siniestro «de extensión superior a las 500 hectáreas quemadas».

Así lo advirtieron ayer los consellers de Interior, Ramon Espadaler, y de Agricultura i Medi Natural, Josep Maria Pelegrí, al presentar en el Parlament el dispositivo para la campaña estival de incendios forestales. La inversión económica en tareas de extinción -bomberos y equipos- se mantiene en la línea del año anterior.

Espadaler explicó que las previsiones a largo plazo -con las lógicas incertidumbres para este tipo de cálculos- sostienen que el verano será muy caluroso, quizá como el del 2003, aunque al mismo tiempo prevén que llueva bastante a finales de junio. Eso sí, si esas precipitaciones no acontecieran, que entra dentro de lo posible, «podría haber algún gran incendio en el que las llamas superaran la capacidad de extinción» de los medios disponibles, asumió el conseller de Interior. Este año ha llovido menos del 50% de la media histórica en gran parte de Catalunya.

Espadaler aseguró que sus prioridades para la campaña serán garantizar una mayor seguridad para los bomberos y mejorar, en lo posible pese a los recortes presupuestarios, los recursos materiales. El conseller dijo, por ejemplo, que se han destinado 580.000 euros a comprar chaquetas forestales ignífugas (hasta ahora solo disponían de ellas las unidades especiales del GRAF) o que se renovarán 1.700 emisoras portátiles, lo que permitirá que todos los bomberos estén localizados por GPS. Los miembros del GRAF dispondrán  además de unas tabletas especiales para poder seguir la evolución de los incendios.

Espadaler anunció asimismo que convocará una oposición para 153 nuevas plazas de bombero funcionario y una promoción de 300 bomberos voluntarios, pero los concursos se realizarán a partir de septiembre, lo que significa que en ninguno de los dos casos llegarán a tiempo para la campaña del 2015.

Por este motivo, la conselleria mantendrá vigente el decreto que ya impuso el pasado año que obligaba a los bomberos a efectuar tres guardias de diez horas durante la campaña -«dependiendo del riesgo de incendio en la zona y otros criterios operativos»- para suplir con más horas de trabajo la falta de efectivos.