Gente corriente

Mohamed Ebna Hasán: "Quiero convertirme en un especialista en diccionarios"

Un diccionario es un puente, y este joven ha hecho uno: de español-bengalí. Busca editor.

«Quiero convertirme en un especialista en diccionarios»_MEDIA_1

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MAURICIO BERNAL

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En el café donde va a tener lugar la entrevista, Mohamed Hasán se presenta con un manuscrito bajo el brazo. Resulta que es el último borrador de su diccionario, el proyecto al que ha dedicado siete años, la primera iniciativa de que se tenga noticia de un volumen español-bengalí. Pasear con el mamotreto bajo el brazo es lo que conviene a un escritor en su tesitura, que es la de muchos escritores: Mohamed quiere que lo publiquen.

-¿El primer diccionario español-bengalí? ¿En serio?

-Es el primero, sin duda. Existe algún libro de vocabulario, pero nada más.

-Cuénteme: ¿por qué lo hizo?

-Pues verá, yo estudiaba español en el Instituto de Lenguas de la Universidad de Daca.

-Daca. Bangladesh.

-Ahí nací yo. Y estudiaba español, pero en clase tenía que utilizar los diccionarios español-inglés, e inglés-español, e inglés-bengalí para entender qué querían decir las cosas, y perdía mucho tiempo. No había diccionario español-bengalí, y todos sufríamos por ello.

-Será que nadie lo ha considerado necesario, no sé.

-Sí, pero tenga en cuenta que hablantes de bengalí hay 300 millones en el mundo. Está entre los 10 idiomas más hablados. ¿Cómo es posible que no haya un diccionario español-bengalí? Son dos lenguas importantes.

-¿Por qué estudió español?

-Estudio; sigo estudiando. Ahora mismo no, ahora solo trabajo, porque las matrículas han subido mucho, pero estoy esperando que vuelvan a dar becas, y entonces pienso hacer un máster. De hecho, fue gracias a una beca que vine la primera vez. En cuanto a su pregunta, al principio, la verdad, yo quería estudiar alemán, en Daca, pero nunca encontraba plaza. Y el español me gustaba: había visto algunas películas y me gustaba cómo sonaba.

-Ese máster del que me habla, ¿de qué es?

-Uno que es perfecto para mí, un máster único en Europa. Lo dan en la UNED, en Madrid, y se llama máster en elaboración de diccionarios y control de calidad del léxico.

-Ah. Quiere dedicarse a esto.

-Quiero convertirme en un especialista en diccionarios, sí.

-Bueno, explíqueme cómo hizo el suyo.

-Empecé a trabajar hace siete años, en Daca. Trabajaba de noche, pasé muchas noches en vela, pero es que de noche se trabaja mejor. Conseguí avanzar mucho, pero cuando vine a Barcelona tuve que bajar el ritmo porque tenía que dedicarme a los estudios. Lo acabé hace dos años, pero un diccionario siempre se está actualizando. Cada vez que aprendo algo nuevo, lo pongo.

-Supongo que consultó otros diccionarios. De español, de bengalí…

-Claro. Usé más de 10 diccionarios, de bengalí-inglés, bengalí solo, español-inglés, español solo, inglés... Y todos aportan algo.

-Son dos idiomas muy distintos.

-Sí, el bengalí desciende del sánscrito y el alfabeto es completamente distinto, y no es urdú, ni indio ni árabe. Es otro alfabeto, y tiene 50 letras. Cada lenguaje tiene una huella distinta, su propia huella digital, y he disfrutado descubriendo esas huellas.

-Me contaba que lo ha propuesto a varias editoriales.

-Llevo dos años intentando publicarlo, he ido a editoriales aquí y en la India, pero nada. Hasta escribí al Instituto Cervantes, pero no les interesó. Para mí haberlo hecho es una satisfacción, pero me gustaría compartirlo con los cientos de estudiantes que cada año entran a estudiar español en mi universidad, en Daca. Les serviría mucho.

-Me dijo que trabaja. ¿En qué?

-Camarero. Es lo único que hay. Pero yo estoy aquí por estudio, y si no me he ido es porque quiero aprender más.