FUEGO EN LAS GAVARRES

Los bomberos dan por controlado el incendio del Baix Empordà

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Los Bomberos de la Generalitat han dado por controlado el incendio que desde ayer afecta a varios municipios del Baix Empordà, especialmente Vall-llobrega, Calonge y Palamós.  Las condiciones meteorológicas favorables, con apenas viento, y el intenso trabajo llevado a cabo por los equipos de extinción ha permitido estabilizar el fuego este mediodía y darlo por controlado sobre las 20.30 horas del lunes, una vez que se ha asegurado todo el perímetro de las llamas. 

No obstante, los bomberos han informado que durante esta noche seguirán trabajando en la zona 15 dotaciones terrestres y 9 vehículos de agua para remojar los rescoldos y para revisar los puntos en los que se detecten columnas de humo. El martes por la mañana está prevista la incorporación de 4 medios aéreos (dos aviones de vigilancia y ataque y dos helicópteros).

Según la última estimación de superficie afectada que han llevado a cabo los Agentes Rurales, el fuego ha carbonizado unas 359 hectáreas, en su mayor parte de masa forestal del macizo de las Gavarres. El municipio más afectado ha sido el de Calonge (con 144 hectáreas), seguido de Palamós (130 hectáreas) y Vall-llobrega (62).

El 'conseller' de Interior, Ramon Espadaler ha explicado en el mediodía del lunes que no se tiene constancia de que se haya registrado ningún daño personal ni material, más allá del vehículo que se quemó ayer en Calonge porque su propietario se aproximó imprudentemente al incendio para ver de cerca el fuego. Todas las personas que fueron evacuadas ayer han podido regresar a sus viviendas y en las próximas horas se cerrará el pabellón habilitado en Palamós para dar cobijo a los posibles afectados.   

Investigación abierta

La zona cero en la que se inició el fuego de Vall-llobrega se encuentra a unos dos kilómetros del núcleo urbano, en las propiedades del Mas Cabré. Se trata de una abrupta vaguada rodeada de bosques en la que el terreno se ha nivelado mediante terrazas Los Agentes Rurales investigaban esta tarde el lugar, especialmente unas manchas blancas de restos carbonizados que parecen ser los puntos en los que se llevaron a cabo unas quemas controladas que desencadenaron el fuego.

Igasi Damases, resposable de los Agentes Rurales de Girona, ha confirmado que esta es la principal “hipótesis”, ya que se sospecha que las personas que llevaron a cabo las quemas de matojos y restos vegetales procedentes del desbrozo de la zona se marcharon sin cerciorarse de que estaban bien apagadas. “Esas quemas se produjeron la semana pasada, pero debido a que las condiciones meteorológicas empeoraron considerablemente durante el fin de semana y el domingo, por culpa del viento, la baja humedad y la temperatura alta se propagó el fuego”, ha afirmado.

Las quemas se produjeron días antes de que entrara en vigor la obligación de pedir permiso para poder llevarlas a cabo. Había suficiente con una notificación, pero incluso en ese caso es necesario cumplir con unos requisitos básicos de seguridad. Unas precauciones que el responsable de los Agentes Rurales de Girona considera que no se cumplieron. “Si el fuego se ha reproducido es que no estaba apagado. De momento no hemos visto que se hubiera tirado tierra encima y estamos investigando si se tiró agua”, ha añadido Dalmases.

Los Agentes Rurales han puesto a disposición de la justicia toda la información que están recabando y ahora será el juez de La Bisbal el que deberá citar a las personas implicadas en el suceso y dilucidar si se trata de un accidente o de una negligencia.