La Generalitat ayudará a los refugiados a buscar vivienda, pero fuera de Barcelona

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La Generalitat ayudará a los refugiados que viven en la Casa Bloc de Barcelona a buscar vivienda fuera de la ciudad, donde los pisos son más asequibles. Este colectivo debe abandonar su actual alojamiento porque ya han cumplido el plazo de integración. El Secretario de Igualdad, Migraciones y Ciudadanía, Oriol Amorós, ha realizado estas declaraciones tras la reunión que ha mantenido este martes con las personas afectadas, un total de cinco familias integradas por 18 personas. Amorós les ha asegurado que no se quedarán en la calle.

Las cinco familias viven en la Casa Bloc, un edificio de Sant Andreu, pero su programa de primera acogida, que normalmente dura seis meses aunque en algunos casos se alarga, está a punto de acabarse, lo que significa que deberán dejar el piso en un plazo de entre dos semanas y dos meses.

"Nadie se quedará en la calle. Estamos trabajando para que todos tengan ofertas. Casi todos hemos buscado oferta, o entidades o nosotros. Podemos comprender que estas personas han pasado por dificultades, pero muy probablemente una parte de la solución será salir de Barcelona hacia donde el acceso a la vivienda sea más económico", ha señalado Amorós."Estas personas están bajo el amparo de un programa del Estado, que está dotado con 200 millones de euros, pero este programa estatal tiene un problema estructural en el apartado de la vivienda", según el secretario de Migraciones.

SIN FINANCIACIÓN

Amorós ha criticado que "el Estado no se ha coordinado con las administraciones para hacer políticas de vivienda. No financia adecuadamente la ayuda a la vivienda. Pone la misma cuantía en todos los municipios de España. Se lo hemos dicho muchas veces  y le hemos hecho varias propuestas concretas para apuntar soluciones", ha agregado.

A su juicio, "el programa estatal no está bien instrumentado porque a las personas refugiadas se les envía a buscar pisos al mercado de alquiler con unas garantías que no son suficientes para estos mercados".

Las personas afectadas están terminando la primera fase del programa estatal (seis meses), y deben entrar en la segunda fase, en la que tienen que encontrar un piso para vivir. "Uno de los problemas es que el Estado asume la ayuda para pagar el piso de alquiler solo durante ocho meses, cuando los contratos son más largos y piden avales que no tienen", según Amorós. La Generalitat no puede avalar pisos de personas.