MACROESTUDIO ESPAÑOL

La dieta mediterránea con aceite o frutos secos reduce en un 30% el riesgo de ictus e infartos

Se han analizado durante 10 años a más de 7.500 personas con tres dietas diferentes

ANTONIO M. YAGÜE / MADRID

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La dieta mediterránea, acompañada de aceite de oliva virgen extra o frutos secos, reduce la incidencia de problemas graves cardiovasculares, como los ictus o los infartos, en un 30%. El trabajo, publicados en la revista 'The New England Journal of Medicine', se ha centrado en el estudio de 7.500 pacientes desde el 2003 que entonces no presentaban un problema cardiovascular. Sin embargo, todos ellos tenían altas probabilidades de desarrollarlo en el futuro ya que padecían problemas como la diabetes o presentaban al menos tres de los factores de riesgo clásico: tabaquismo, hipertensión u obesidad.

A un grupo de control se le ofreció una dieta baja en grasas, mientras que otros dos grupos cumplieron con una dieta mediterránea. En un caso suplementada con nueces y en otro con aceite de oliva virgen extra. Los mejores resultados se obtuvieron en estos dos últimos casos, en los que se certificó una reducción del riesgo cardiovascular en un 30 %, porcentaje que se elevó a un 49 % en el riesgo de accidente cerebrovascular en relación con la dieta de referencia, baja en grasas. "Los resultados del estudio explican, en parte, la menor mortalidad cardiovascular en los países mediterráneos en relación con los países del norte de Europa y con Estados Unidos", según se recoge en la publicación de la revista médica de mayor impacto internacional. Los resultados "demuestran claramente la superioridad de la dieta mediterránea", según Ramón Estruch, del hospital Clínic de Barcelona, el investigador principal del estudio.

Suplemento diario

Estruch explicó que la cantidad de aceite a añadir en la dieta para obtener la prevención cardiovascular sería de 50 miligramoss de aceite de oliva virgen  (unas tres cucharadas soperas)  o unos 30 gramos (un puñado) de nueces, avellanas y almendras."Este estudio ha creado marca en el mundo. No solo es el mayor ensayo clínico que se haya hecho en España, sino que ha permitido crear una base de datos que será un patrimonio esencial para la investigación en nutrición en España durante, al menos, los próximos veinte años. Su relevancia ha traspasado fronteras y ha suscitado un gran interés en todo el mundo", ha apostillado Estuch .