Renfe vaticina que la solución del conflicto de los maquinistas va para largo

El director general de viajeros de Renfe, Enrique Urkijo, ha limitado a 40 profesionales de un total de 530 el número de maquinistas de Rodalies que están secundando la huelga que afecta al servicio ferroviario en la provincia de Barcelona desde este lunes. Urkijo les ha acusado de querer "trabajar menos y ganar más" y ha vaticinado que el conflicto está lejos de resolverse.

La compañía ya ha abierto seis expedientes sancionadores a otros tantos maquinistas desde este domingo, si bien Urkijo ha destacado que pueden tardar más de un mes y medio en hacerse efectivos. No obstante, ha hecho un llamamiento a la responsabilidad de los maquinistas y les ha recordado que más de 5.000 profesionales de toda España secundaron el acuerdo que se firmó en julio y que establece las actuales condiciones laborales.

Urkijo ha recordado que el sueldo medio de un maquinista de Rodalies es de unos 60.000 euros, casi un 50% más, según ha dicho, que el de sus colegas en los Ferrocarrils de la Generalitat. En este sentido, ha informado de que los participantes en la huelga encubierta pretenden tener 12 días más de vacaciones (además de los 41 de que ya disponen), ganar 1.000 euros más al año y trabajar 14 minutos menos al día. Estas condiciones se lograrían sin afectar el correcto funcionamiento del servicio contratando a 50 maquinistas más.

Reunión con la Conselleria d'Empresa

Esta tarde la operadora asistirá a una reunión convocada por la Conselleria d'Empresa i Ocupació, aunque Urkijo se ha mostrado pesimista: "Es difícil que la Generalitat pueda lograr algo", ha dicho.

Rodalies transporta unos 372.000 pasajeros al día, según el director de Rodalies, Miguel Ángel Remacha, por lo que el paro de estos días "afecta a todos ellos".

Horas antes, Remacha había lamentado que la "huelga de celo" está causando retrasos en todas las líneas de la red que alcanzan la media hora. El responsable ferroviario ha asegurado que las demoras están provocadas porque los trabajadores dan de baja los trenes alegando que no cumplen las condiciones lo que, según los empleados, está motivado porque los asientos "no son lo suficientemente ergonómicos".

Remacha ha revelado que SEMAF exige que se contraten 50 maquinistas más ya que los horarios que está marcando la operadora no son del agrado del sindicato mayoritario. El directivo ha revelado que este lunes se anularon 41 servicios y, el domingo, seis. La compañía ha insistido en que no va a poder garantizar este miércoles la normalidad en la circulación de los trenes, aunque está pendiente de cómo evoluciona la situación. La línea R-7 es la más afectada, dado que es también la que tiene una menor frecuencia de convoyes.

"Víctimas de la compañía"

Por su parte, el portavoz de SEMAF, Jordi Escudé, ha asegurado que los maquinistas son "víctimas" de la compañía ferroviaria y que si no pueden descansar 45 minutos cada cinco horas y media (lo que les permite a continuación trabajar hasta las ocho horas, según la ley) no están "en condiciones" de continuar prestando el servicio.

El director general de Mobilitat de la conselleria de Territori i Sostenibilitat, Ricard Font, ha calificado la situación de "absolutamente inadmisible". La Generalitat ya ha tomado cartas en el asunto y ha pedido a la operadora que retorne el importe de los billetes a todos los pasajeros sin excepciones. También ha pedido que se abre un expediente informativo a Renfe para analizar el asunto. Igualmente, la Conselleria d'Ocupació estudia el caso para ver qué se puede hacer con los huelguistas a efectos laborales.

Sobre el malestar del Govern, Urkijo ha recordado otros conflictos que han afectado a la sociedad: "Yo tampoco estaría contento, pero también ha habido huelga de Ferrocarrils y problemas con los controladores, pero esta situación no depende de Renfe".