Ridao da un primer paso y exige una ERC anclada en la izquierda

Pasaron las elecciones y pasaron los pactos municipales. La veda congresual se ha levantado en ERC y su número dos, Joan Ridao, es el primero en mover ficha. No se postula formalmente, pero envía un globo sonda a las bases para conocer con qué apoyos cuenta. Tras varias semanas peinando el territorio y dejándose querer en entrevistas, el secretario general republicano ha impulsado un documento con el que pretende centrar el debate interno en la confrontación de las ideas, y no tanto en los nombres. El alegato es claro: Esquerra debe seguir siendo un partido progresista que tenga por objetivo estratégico construir una alternativa a CiU, y no dejarse deslumbrar por «frentes patrióticos». El manifiesto defiende, asimismo, que la unidad no puede ser una excusa para soslayar el debate ideológico.

Junto con Ridao, una quincena de dirigentes secundan esas tesis, que ya circulan por internet a través de una web (www.ideeserc.cat) y de las redes sociales. Entre los firmantes se encuentran elexconseller en capJosep Bargalló, elexconsellerJordi Ausàs, el diputado en el Congreso Joan Tardà y el portavoz del partido, Ignasi Llorente. Este sector quiere aprovechar el silencio de las figuras que más suenan como posibles candidatos a la dirección, como Oriol Junqueras y Anna Simó, para dejar por escrito su plan de renovación del partido. Una invitación implícita a que el eurodiputado y la portavoz en el Parlament, el tándem avalado por el líder saliente, Joan Puigcercós, para el congreso del 1 de octubre, concreten cuál es su proyecto para ERC.

«Los cambios pendientes deben tener muy presente cuál es nuestra tradición política. [...] No nos confundamos: hay otras tradiciones muy respetables, y la conservadora es la que va desde la Lliga hasta CiU. [...] La aspiración de Esquerra no es la de polarizar la sociedad catalana entre catalanistas (de derechas o de izquierdas) y no catalanistas», sostiene el documento. Ridao trata de alertar así contra las tentaciones de escorar el partido hacia el eje nacional, priorizando la unión con otras fuerzas independentistas y tejiendo complicidades con CiU.

EJEMPLO A SEGUIR / Precisamente, Junqueras afirmó el sábado, tras ser investido alcalde de Sant Vicenç dels Horts (Baix Llobregat), que su alianza municipal con ICV-EUiA y CiU debe ser «un ejemplo en otros ámbitos». El manifiesto de Ridao replica, en cambio, que ERC debe «ampliar su perímetro hacia el conjunto del catalanismo de izquierdas», y no intentar «homogeneizar un espacio independentista complejo y plural».

Fuentes de este sector aseguran que Ridao «no será un obstáculo», pero está a la espera de ver qué movimientos se producen para decidir si planta batalla. El consejo nacional se reunirá este sábado con, al menos, dos manifiestos sobre la mesa: el de Ridao y otro que presentarán el viernes los principales alcaldes del partido. Ambos rechazan, por ejemplo, los cambios radicales y apuestan por combinar renovación y experiencia en la nueva ejecutiva.