Rafael Catalá cree que no se imputó antes a Artur Mas para no interferir en el 27-S

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha interpretado este martes que la imputación del presidente de la Generalitat en funciones, Artur Mas, por el 9-NArtur Mas9-N no se produjo antes para no interferir en las elecciones catalanas, pero que, una vez pasado el 27-S, es "lógico y razonable" que la justicia siga con sus trámites.

Catalá ha hecho estas declaraciones tras conocerse que el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) ha citado a declarar el 15 de octubre a Mas por la consulta alternativa del 9 de noviembre, y dos días antes, a la entonces vicepresidenta del Govern, Joana Ortega, y a la 'consellera' de Ensenyament en funciones, Irene Rigau.

"Lo que yo creo que ha tomado en consideración el TSJC es no haber interferido en el proceso electoral y no haber llevado este tipo de actuación a las últimas semanas, donde seguramente sí hubiera podido haber una cierta contaminación de un proceso judicial y electoral", ha dicho Catalá a los medios tras reunirse con la consejera de Justicia de Navarra, María José Beaumont.

Según el titular de Justicia, el TSJC, que ha resuelto las imputaciones a raíz de una querella de la Fiscalía, ha tenido cuidado de "no mezclar los tiempos jurídicos y políticos". Catalá ha apelado, además, a la presunción de inocencia: "La mera imputación no supone una presunción de culpabilidad; al contrario, la Constitución lo que garantiza es la presunción de inocencia".

"SATISFACCIÓN" ENCUBIERTA

La vicepresidenta del Ejecutivo catalán, Neus Munté, ha tachado las declaraciones del ministro de Justícia de "ejercicio de cinismo". "La presión sobre la fiscalía no se ha parado en ningún momento, ni durante la campaña electoral; aquí no hay coincidencia ni respeto por ningún período electoral, por ninguna fecha. Si fueran sinceros deberían mostrar satisfacción", ha dicho.

LA NEGOCIACIÓN CON LA CUP

Munté ha afirmado que la imputación no ha de influir en la negociación tras el 27-S de Junts pel Sí con la CUP, partido que, aunque ha mostrado su solidaridad con Mas, ya ha dejado claro que eso no le hará reconsiderar su oposición a investir al líder de CDC como jefe del GovernCDC: "No creemos que esto tenga ninguna afectación sobre los pasos que con normalidad se han de dar en las próximas semanas para poder constituir el Parlament y continuar con la hoja de ruta que ha obtenido una mayoría absoluta en el Parlament con 72 diputados a favor del proceso", ha dicho.