El PSC exige disciplina a Ventura y Geli para quedarse en el grupo

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, abrió ayer la puerta a que las diputadas Marina Geli y Núria Ventura sigan formando parte del grupo socialista en el Parlament aunque dejen la militancia en el PSC y formen otro partido. La condición que puso Iceta es que ambas parlamentarias acaten la disciplina de grupo.

El nuevo conflicto interno se ha originado al conocerse la intención de Geli y Ventura, junto a los exconsellers Antoni Castells y Montserrat Tura, de constituir un nuevo partido político que será el fruto de la unificación entre Nova Esquerra Catalana, donde milita el también exconseller socialista Ernest Maragall -hoy eurodiputado tras presentarse junto a ERC- y la corriente crítica Moviment Catalunya, que agrupa a dirigentes históricos del PSC.

EXIGENCIA DE COHERENCIA / «Si ellas consideran que pueden seguir haciendo las tareas parlamentarias que se les ha encomendado con la disciplina del grupo socialista, podrán seguir haciéndolo, pero primero hay que hablarlo con ellas», argumentó Iceta ayer. Y emplazó a Geli y Ventura a decidir si pueden hacer compatible la tarea de diputadas con el «esfuerzo político» que dedicarán ahora a forjar otro partido. En caso contrario, «deberían tomar la decisión con coherencia».

Ayer, Geli explicó que su intención es la de darse de baja próximamente del PSC, pero sin renunciar al escaño que ocupa en el Parlament después de presentarse en las listas socialistas en los comicios del 2012.  Geli justificó esta decisión por el hecho de que, a su juicio, pese a que cambie de partido, sigue fiel al programa electoral con el que concurrió en las elecciones de hace dos años y que incluía el apoyo al derecho a decidir de los catalanes. La exconsellera no sigue el ejemplo de Joan Ignasi Elena, que ya el pasado 23 de septiembre abandonó el escaño que ocupaba en el grupo socialista. Elena forma parte de la corriente Avancem, y las discrepancias con la cúpula del PSC en relación al derecho a decidir le llevaron a ceder su escaño.

En cambio Geli no concretó todavía cuando se hará efectiva la baja de militancia del PSC. Es más, dejó abierta la posibilidad de renunciar a su escaño en el caso de que se convoquen elecciones anticipadas. «Estaremos atentos porque esto podría cambiar la situación», apuntó la exconsellera.

Con la propuesta de Iceta a las diputadas díscolas de que mantengan su escaño a cambio de disciplina, el líder del PSC trata de atajar otra crisis interna en el seno del grupo socialista, sin iniciar expedientes internos, como sí sucedió cuando los díscolos se desmarcaron de una votación sobre el derecho a decidir y el entonces primer secretario, Pere Navarro, les abrió un expediente y les dejó sin atribuciones en el grupo.