Los retoques del cangrejo

Junts pel Sí y Catalunya Sí que es pot ven una involución autonómica en la idea de reforma de la Constitución esbozada por el ministro de Justicia El PPC niega voluntad de recentralización

Marta Rovira (ERC) y Josep Rull (CDC), el miércoles en un acto de Junts pel Sí.

Marta Rovira (ERC) y Josep Rull (CDC), el miércoles en un acto de Junts pel Sí. / periodico

FIDEL MASREAL / BARCELONA

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Se trata de un esbozo de reforma constitucional, el apuntado por el ministro de Justicia, Rafael CataláRafael Catalá, y este viernes confirmado por el presidente Mariano Rajoy. No existe un documento elaborado al respecto, ni el consenso político necesario para que prospere en el Congreso. Pero su intención de delimitar las competencias del Estado y las de las comunidades autónomas (además de redefinir el Senado y eliminar la preeminencia masculina en la sucesión a la Corona) ya ha logrado la plena coincidencia entre diversos contendientes del 27-S: la candidatura independentista Junts pel Sí, la CUP y también el bloque de izquierdas de Catalunya Sí que es pot.

Así lo expuso el número dos de CDCJosep Rull. "Es un escándalo", sostuvo de forma rotunda en Catalunya Ràdio. Según Rull, la intención última del Gobierno de Mariano Rajoy es, en caso de repetir, victoria electoral, "blindar las competencias del Estado en detrimento de las competencias de las autonomías". "En pleno proceso y en el debate que hay en Catalunya, la única ocurrencia que viene del Gobierno español es abrir la Constitución para recentralizar", subrayó.

El candidato de Catalunya Sí que es pot, Lluís Rabell, en declaraciones a Efe, calificó la iniciativa del PP de "retrógrada" y "liberticida". Según el exlíder vecinal, la intención del PP ante las elecciones catalanas es presentarse como un partido "duro" para volver a movilizar a su electorado.

"IGUALITO QUE EN ESCOCIA"

El hasta ahora diputado de la CUP David Fernàndez ironizó en Twitter con la intención del Gobierno de "blindar" las competencias del Estado: "Igualito que en Escocia, tú. Calcado". A continuación, intercambió algunos tuits con Lluís Rabell en relación a la necesidad o no de contribuir a la derrota del PP en las próximas elecciones generales.

Solo Ciutadans no rechazó las intenciones del Gobierno. Pero la candidata en las elecciones del 27-S, Inés Arrimadas, restó credibilidad al PP para formularla: "En cuatro años de Gobierno con mayoría absoluta no han hecho nada". Arrimadas se limitó a apostar por una reforma para "evitar duplicidades".

Obviamente, quien defendió la posible modificación fue el candidato del PP catalán, Xavier Garcia Albiol. No se trata, dijo, de ningún proceso de recentralización del Estado. El popular usó el mismo argumento que Ciutadans: se trata de lograr unas administraciones más eficaces. De lo que se trata, según Albiol, es "de plantear cuál sería el modelo o fórmula mejor para que los servicios que se deben prestar, y la realidad que tiene el país, se recojan de forma más idónea". Una respuesta ambigua para una propuesta constitucional inconcreta.

La reforma de la Carta Magna aparece ya en las intenciones de varias candidaturas cara a las elecciones generales. Ante ello, la respuesta política catalana ha sido la del escepticismo total por parte del independentismo, la del apoyo a la reforma pero en un sentido federal o confederal (por parte del PSC y Unió) y el punto de vista del presidente de la Generalitat, Artur Mas, también escéptico, pero dispuesto a incluir esta reforma como una opción más en un eventual referéndum independentista.