El juez procesa a los mandos policiales imputados en el 'caso Faisán'

El juez de laAudiencia Nacional Pablo Ruz haprocesadoalexdirector general de la Policía, Víctor García Hidalgo, y a los otros dosmandos policiales imputados en elcaso Faisán, que investiga al presuntochivatazo en mayo del 2006 a lared de extorsión de ETA, porrevelación de secretos, encubrimiento y  colaboración con banda armada. Los dos procesados junto a Hidalgo son el inspector de la Brigada de Información de Álava, José María Ballesteros, y el jefe superior de Policía del País Vasco, Enrique Pamiés.

En su resolución, de 75 folios, el magistrado tiene en cuenta que la filtración se descubrió gracias a la baliza que el presunto etarra Joseba Elosua tenía instalada en su coche y que grabó una conversación en la que este le contaba a su cuñado que había recibido unallamada de la policía advirtiéndole de la inminente detención de la red de extorsión deETAy explicándole que le avisaba por el proceso denegociación política que entonces estaba en marcha entre elGobiernoy labanda terrorista.

Para el juez, "en el presente momento aparecenmotivos bastantes para afirmar que los ahora procesados pudieron cometer" los mencionados delitos y concluye que los tres mandos policiales pudieron filtrar a ETAdetenciones inminentes que se iban a producirse. Ruz tomará declaración indagatoria a García Hidalgo, Pamiés y Ballesteros el próximo 19 de julio a partir de las 10.00 horas para comunicarles su procesamiento.

Ruz rechaza el sobreseimiento y nuevas diligencias

El juez rechaza elsobreseimientode la causa que habían pedido las defensa de los tres mandos policiales y también descarta practicar nuevasdiligencias.

Elcaso Faisán investiga el supuestochivatazo policial que en mayo del 2006 abortó la detención en elbar Faisán de Irún de los miembros de la red de extorsión de ETA.

Elauto del juez se produce 24 horas despúes de la toma de posesión como ministro del Interior deAntonio Camacho, secretario de Estado de la Seguridad cuando ocurrieron los hechos. Elteléfono móvil de Camacho fue investigado por Ruz para ver si el ahora ministro había participado en la trama del chivatazo dado que había recibido llamados de dos de los imputados. La investigación determinó que las llamadas eran propias del cargo desecretario de Estado que ocupaba Camacho y el juez decidió no citarle como testigo del caso.