Rigol, De Gispert y Benach reclaman una respuesta contundente de los catalanes si el TC inhabilita a Forcadell
Los expresidentes del Parlament muestran su "apoyo total" a la presidenta de la Cámara y afirman que habrían actuado igual que ella
Joan Rigol, Ernest Benach y Núria de Gispert, expresidentes del Parlament, han denunciado este miércoles en declaraciones a Catalunya Ràdio la respuesta del Tribunal Constitucional (TC) ante la votación de las conclusiones de la Comissió d'Estudi del Procés Constituent y han apelado a la necesidad de una respuesta "democrática y contundente" por parte de la ciudadanía en el caso que finalmente se inhabilite a Carme Forcadell, actual presidenta de la Cámara catalana.
"La inhabilitación de un tribunal significaría la habilitación por parte del pueblo de Catalunya", ha asegurado Rigol en referencia a una respuesta que debería ser, en palabras de Benach, "democrática, cívica y pacífica, pero contundente". Más allá de la réplica de la ciudadanía, los expresidentes del Parlament han apostado también por una sentencia "política" -y no jurídica- de las instituciones catalanas.
"La mejor respuesta política es continuar con lo que está previsto", ha asegurado Benach en referencia a los 11 meses de legislatura, las tres leyes de desconexión previstas, la aprobación de los presupuestos y la cuestión de confianza a la que se someterá Carles Puigdemont el 28 de septiembre.
Por otro lado, los tres expresidentes han reiterado su apoyo a Forcadell y han asegurado que, de haber estado en su situación, habrían actuado igual que ella. De Gispert, Benach y Rigol también han coincidido en denunciar la falta de base jurídica de las peticiones del Consejo de Ministros y han comparado este caso con el del juicio oral que se abrirá el año que viene contra el expresidente de la Generalitat Artur Mas, la exvicepresidenta Joana Ortega y la exconsejera Irene Rigau por el proceso participativo del 9-N.
En este caso, han asegurado los expresidentes del Parlament, "tampoco había base legal porque era un proceso participativo" y por esta razón, según ha predicho De Gispert, si el objetivo del Estado "es que las instituciones catalanas queden totalmente anuladas, buscarán los resortes que sea para inhabilitar a Forcadell".
Los expresidentes también han asumido que los "ataques sistemáticos" del Estado contra las instituciones catalanas se intensificarán en los próximos meses y esperan que los políticos catalanes sigan con el trabajo que están llevando a cabo en el Parlament y el Govern. En este sentido, han asegurado que hay mecanismos parlamentarios para continuar con la acción legislativa y han asegurado que para aprobar las tres leyes de desconexión pueden seguir el mismo procedimiento que con las citadas conclusiones: la Mesa podría no incluir la votación en el orden del día del Pleno y, posteriormente, serían dos grupos parlamentarios -Junts pel Sí y la CUP- quienes pedirían una ampliación del orden del día para incluirla en la votación.
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