DICTAMEN DE BRUSELAS

La UE amenaza con impugnar la ley catalana del cine porque favorece al castellano

JOSE RICO / Barcelona

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LaComisión Europeaha puesto en entredicho la legalidad de la ley catalana del cine y denuncia que el texto favorece al castellano en detrimento del resto de lenguas europeas. Según la UE, la norma es "discriminatoria" y vulnera la legislación comunitaria sobre la libre circulación de servicios porque exime a las películas en lengua española de la cuota del 50% de doblaje al catalán que impone a las cintas de otros idiomas europeos. Por ello, Bruselas amenaza con recurrir la ley alTribunal de Justicia de la UEsi no se modifica en un plazo de dos meses.

En un dictamen, la UE cuestiona elartículo 18de la norma catalana, que establece que las empresas distribuidoras deberán doblar o subtitular al catalán la mitad de los filmes que se estrenen en Catalunya, cuota de la que están exentas las películas españolas en versión original en castellano. A su juicio, esta excepcionalidad vulnera lalibre competenciay obliga a las distribuidoras europeas a pagar un sobrecoste, que la Comisión Europea estimaentre los 25.000 y los 77.000 eurosen doblaje, y entre 2.000 y 5.730 euros en subtitulación. Este encarecimiento, concluye el dictamen, "dificulta el acceso de las cintas europeas en el mercado del Estado".

El organismo comunitario señala que, a pesar de que el Tribunal de Justicia de la UE reconoce la legitimidad de las políticas estatales depromoción lingüísticay que "el objetivo de interés general que busca la ley es totalmente legítimo", las medidas de aplicación deben respetar determinadas condiciones y "no originar discriminaciones" que menoscaben los derechos de otros Estados miembros. El dictamen sostienen que, si bien la norma fija una excepción general para las películas cuya distribución seainferior a 16 copias, más de la mitad de las cintas europeas no españolas distribuidas en Catalunya se ven afectadas por la cuota de doblaje.

Hace un año, y después de un boicot de las grandes distribuidoras cinematográficas que culminó con una huelga de las salas de cine en febrero del 2010, el 'conseller' de Cultura, Ferran Mascarell, cerró un acuerdo con las 'majors' para permitir que se doblen al catalán una treintena de títulos al año, anteponiendo el diálogo a la imposición de cuotas lingüísticas en el sector. Por ello, Mascarell ha admitido la "paradoja" que supone el dictamen de Bruselas, que no ha sido una sorpresa para el Govern, aunque lo ha considerado "positivo" en tanto en cuanto no cuestiona la protección del catalán.