Aguirre aboga por afrontar con "patriotismo" la crisis provocada por las "tensiones secesionistas"

La expresidenta de Madrid afirma ahora que "no va a dejar la política en su vida"

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La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha abogado este viernes por afrontar la "crisis política" provocada por las "tensiones secesionistas con decisión, rigor y patriotismo, que es lo que se necesita muchas veces en España".

La diferencia entre patriotismo y nacionalismo, ha manifestado en la Convención Nacional de Nuevas Generaciones del PP, es que el patriotismo es "amor a lo propio, a su tierra, a sus costumbres, a su cultura y a su lengua", mientras el nacionalismo es "rechazo a lo ajeno".

Aguirre ha confesado además que jamás se alejará la política, pese a haber decidido hace más de un año dejar la presidencia de la Comunidad de Madrid. "Consideré -ha explicado- que era muy bien momento para que, a mis 60 años, pudiera dejar paso a personas más jóvenes, sin dejar nunca la política, porque la política yo no la voy a dejar en mi vida".

La 'lideresa' se ha referido también a la crisis económica, que aunque ha afectado a "todos los países", en España ha acarreado una tasa de paro muy superior a la del resto de países de la Unión Europea a causa de "la rigidez del mercado laboral y otras rigideces", a la "falta de diagnóstico" por parte del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y a que "se ha gastado demasiado".

"Todos hemos gastado demasiado, las personas, las familias, las administraciones públicas, todos hemos pedido más dinero a crédito de lo que podíamos devolver y ese es el problema que tenemos ahora", ha afirmado, para agregar que "algunas cuestiones" apunta a que ya se está saliendo de la crisis.

El desapego y la corrupción

También se ha referido a una "crisis de desapego" hacia los políticos, porque la gente "siente como si los políticos fueses una casta aparte, que no se mezcla con ellos, que no se ocupa de sus asuntos, que tienen todos unos sueldos fenomenales y, por lo tanto, no les afecta el paro". En definitiva, siente que "los políticos se preocupan más de agradar a los que tienen por encima y les van a poner en las listas que de resolver los problemas que tiene la ciudadanía".

"Eso es un problema muy grave que tenemos que afrontar, sin olvidar que, a mi modo de ver, en el último año la mayor causa del desapego a los políticos ha sido la corrupción", ha señalado la dirigente popular, para agregar a reglón seguido que la corrupción es una cuestión que puede darse en todas partes. "Lo importante es cómo lo atajamos, qué hacemos con los corruptos, cómo luchamos contra ello", ha recalcado.