Zapatero anuncia que la jubilación a los 67 años entrará en vigor en el 2027

josé Luis Rodríguez Zapatero fue el jueves, durante el balance que realiza al final de cada año, varios presidentes del Gobierno. El que no duda a la hora de aprobar reformas económicas que reconoce que son difíciles e impopulares, el que enarbola la bandera social -que ahora parece aparcada tras las dentelladas de los mercados- para calmar a un PSOE que encara las elecciones autonómicas y municipales de mayo sumido en el desánimo, y el que critica al PP por no tener suficiente «espíritu democrático». Tras el último Consejo de Ministros del 2010, el jefe del Ejecutivo tiró balones fuera cuando se le preguntó por sus planes de futuro, pero resolvió el principal interrogante en torno a la reforma de las pensiones que prepara el Ejecutivo: el retraso de la jubilación a los 67 años se realizará de forma gradual durante 15 años, desde el 2013 hasta el 2027.

EL RETIRO Un retraso progresivo durante 15 años

A comienzos del 2010, cuando anunció su intención de ampliar la jubilación hasta los 67 años frente a los 65 que rigen en la actualidad, el Gobierno pensó en hacerlo de forma escalonada entre el 2013 y el 2025, de forma que cada curso la edad legal de retiro aumentaría dos meses. Ahora ya no. El presidente detalló que el plazo será de 15 años, entre el 2013 y el 2027. Es decir, que el desplazamiento entre la edad actual y la deseada se llevará a cabo al ritmo de un mes y medio por año: en el 2013, será de 65 años y un mes y medio; en el 2014, de 65 años y tres meses, y así hasta llegar a los 67 años en el 2027.

La comisión parlamentaria del Pacto de Toledo aprobó el miércoles pasado sus recomendaciones sobre la reforma de las pensiones. En ellas no hay nada sobre el retraso de la edad, pero Zapatero reiteró ayer que el 28 de enero aprobará el proyecto de ley que incluirá esa medida. También emplazó al líder del PP, Mariano Rajoy, a que apoye una iniciativa que considera fundamental para garantizar el sistema, debido al envejecimiento de la población. «¿Alguien piensa que el Gobierno impulsa esta reforma por algo más que sentido de la responsabilidad? -se preguntó-. La reforma de las pensiones es sensata y Rajoy lo sabe. Le pido un espíritu un poco más democrático. Espero que se moje».

MÁS REFORMAS «Son el camino. Hay que ser responsable»

Pero la de las pensiones no es la única reforma que Zapatero prepara para el 2011. En el año que ahora empieza el Gobierno también pretende concluir la del sistema financiero, (cajas, principalmente), la del sector servicios y el plan de política industrial. Aquí salió el Zapatero de los últimos tiempos, el mismo que afirmó en el debate sobre el estado de la nación que su intención era continuar por esa senda «cueste lo que cueste». «Estas reformas las tenemos que hacer ahora. Este es el camino. Las fuerzas políticas deben mostrar su responsabilidad al servicio de los ciudadanos. El PSOE se la va a jugar por España a la hora de hacer reformas porque siempre se la ha jugado», sostuvo el presidente, que ahora, a diferencia de lo que consideraba el pasado septiembre, no piensa que las tensiones de los mercados hayan «desaparecido».

POLÍTICAS SOCIALES Sacar pecho de lo realizado hasta ahora

Zapatero lleva meses escuchando cómo varios barones socialistas -como el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, y el de Extremadura, Guillermo Fernández Vara- le acusan de haberse olvidado del discurso social con su empeño reformador. El presidente no anunció nuevas ayudas (hay poco dinero en caja), pero sí explicó que acudirá al Congreso para sacar pecho por lo aprobado hasta ahora. Aquí se situó ya en la precampaña de los comicios de mayo. No se detuvo en los recortes. «En época de crecimiento impulsamos ayudas con fuerza. En época de crisis lo hacemos de forma limitada, pero lo hacemos -dijo-. Se verá el esfuerzo titánico que hemos hecho para preservar los grandes pilares del Estado del bienestar, los clásicos y los impulsados desde el 2004».

LA SUCESIÓN El líder mantiene

la gran incógnita

«No es el lugar ni el momento. No voy a decir nada», contestó Zapatero cuando fue preguntado sobre si pensaba ser el candidato socialista a las generales del 2012, unas elecciones que según las encuestas ganará el PP con holgura. Sin embargo, en idéntico lugar (la Moncloa) pero en distinto momento (hace una semana), el jefe del Ejecutivo dijo más de lo que había dicho hasta entonces sobre el asunto: que ya había tomado la decisión y que se la había adelantado a un miembro de un PSOE que observa inquieto la indefinición que su líder mantiene sobre su futuro. Eso sí, Zapatero -con Alfredo Pérez Rubalcaba, el vicepresidente primero a quien muchos señalan como su recambio, sentado en primera fila de la sala de prensa- insistió en que iba a concluir la legislatura sean cuales sean los resultados de los comicios de mayo y que nunca, a lo largo de este «complicado» año, se le había pasado por la cabeza dimitir.

EL FIN DE ETA «Solo vale el cese total de la violencia»

En las últimas semanas se multiplican los rumores sobre un inminente comunicado de ETA, pero si se produce en nada cambiará la acción del Gobierno. «No valen subterfugios ni palabras gastadas -contestó el presidente-. Eso está muy visto ya. Solo vale el abandono definitivo de la violencia, el cese total y absoluto». ¿Y las palabras del encarcelado líder de la izquierda aberzale Arnaldo Otegi, que dijo a The Wall Street Journal que la banda estaba dispuesta a dejar las armas? «Las leo y punto. Es alguien que ha hecho muchas declaraciones en los últimos tiempos», remató.

EL 'CASO COUSO' «Hemos tenido una sola posición»

Una de las más importantes revelaciones de los despachos de la diplomacia estadounidense filtrados por Wikileaks, en lo referente a España, sostiene que los ministros socialistas trabajaron para que no prosperasen las órdenes de detención contra tres militares norteamericanos implicados en la muerte de José Couso, el cámara de Tele 5 que falleció durante la toma de Bagdad por disparos de un blindado. «El Gobierno siempre ha mantenido una misma posición, pública y privada, en todos los temas con EEUU. También en el caso Couso -declaró Zapatero-. Es lo que sé, lo que afirmo y lo que mantengo».