Ciutadans pide que los votos en blanco se conviertan en escaños vacíos

Ante la proliferación de micropartidos que proponen un voto en blanco computable, la fuerza política más pequeña del Parlament, Ciutadans, quiere zafarse de la idea, que reduciría la representación de los grandes partidos. El candidato antinacionalista, Albert Rivera, planteó ayer que la futura ley electoral de Catalunya

-si es que algún día ve la luz- transforme los votos en blanco en escaños vacíos. Por su inefectividad, el voto en blanco (considerado una forma de abstención activa) beneficia hoy al partido que gana los comicios.

En las autonómicas del 2006 se contabilizaron 60.244 votos en blanco, 30.000 sufragios menos que los que obtuvo Ciutadans. El porcentaje de este tipo de voto llegó al 2,02%, solo un punto por debajo de la barrera mínima legal para entrar en el Parlament. Todos los sondeos cara al 28-N

pronostican un aumento del voto en blanco y de la abstención, un cóctel que se le puede atragantar a alguno de los partidos tradicionales.

Rivera asume así una idea que patentaron hace años grupos como Escons Insubmisos y Ciudadanos en Blanco, que, aunque presentan listas de candidatos, prometen dejar vacíos sus asientos en el Parlament si obtienen representación. El experimento, sin embargo, no cala en la sociedad, a pesar de la desafección. En el 2006, Escons Insubmisos solo consiguió 6.922 votos, mientras que Ciudadanos en Blanco apenas reunió 626 sufragios.