Transparencia en el caso de Salou

El 'conseller' de Interior, Jordi Jané, puso ayer en su comparecencia en el Parlament un correcto punto y seguido -la investigación judicial continúa- en las explicaciones sobre la actuación de los Mossos contra el 'top manta' en Salou, donde resultó muerto un ciudadano senegalés. A diferencia de otros casos en que se han producido heridos o fallecidos en actuaciones de agentes autonómicos, el actual 'conseller' ha mantenido una actitud de transparencia encomiable.

Solo la procedimiento judicial para dilucidar responsabilidades concluirá el caso, pero evitar el falso corporativismo y la opacidad ayuda mucho a no agriar la polémica. La sesión parlamentaria de ayer fue una buena muestra de ello. A diferencia de otras ocasiones, los grupos parlamentarios no pusieron objeciones a las explicaciones y solo se suscitó el debate sobre la conveniencia de que los agentes vayan provistos de cámaras individuales para registrar sus acciones. Así lo han pedido los sindicatos de Mossos para evitar falsas denuncias. Pero, como indicó Jané, el problema no es solo técnico y presupuestario sino también legal, porque las grabaciones deberían contar con autorización judicial. Otro punto en el que existe una amplia coincidencia ha de ser destacado también: el problema del último eslabón del 'top manta', los manteros, ha de tener tratamiento esencialmente social, mientras que a la policía corresponde fundamentalmente perseguir el negocio ilegal de las redes que suministran el material de contrabando.