Ternura sobre muñeco

Se ha despedido Pilar Rubio de El hormiguero (A-3 TV). Baja por maternidad. Un adiós muy emotivo. Le decía Pablo Motos, lleno de afecto: «Hay mucha gente que se fija en ti porque estás buena. Pero se fijan solo en lo que llevas por fuera. Aquí nos hemos dado cuenta de que lo mejor de ti está dentro». ¡Ahh! Qué hermosa melodía. Ha encontrado Pilar Rubio en El hormiguero lo que le negaron en Operación Triunfo -acabó saliendo por la puerta de servicio-, o en la teleserie Piratas, otra decepción. Con Motos, en cambio,ha sido feliz. Lo más significativo de esta despedida fue no obstante verla aparecer con una criatura en brazos. Ella todavía no había dado a luz, pero salió con un bebé. Y le abrazaba. Y se emocionaba. Y le acunaba como si fuera su hijito. Lo tremendo es que el bebé era un muñeco. Uno de esos reborn fabricados con vinilo, lana de mohair, y ojos de vidrio. Pilar se esforzaba en transmitirle calor. Le retenía en su pecho. Le miraba con ternura. Le arrullaba con cariño. Pero el reborn le devolvía una mirada inanimada. Ausente. Sin vida. ¡Ah! La soledad del espectador ante la tele es algo parecido. Miramos y miramos con interés y devoción, pero el televisor nos devuelve una mirada vacía. Ojo de cristal. Polvo de vidrio.

LA AFONÍA DE SANDRA .- No pudo terminar El intermediodel miércoles. Estaba tan afónica, que Thaïs Villas, sobre la marcha, tuvo que sustituirla. Y este detalle tan nimio, tan sin ninguna importancia, tan absolutamente pequeño, insignificante e intrascendente, ha elevado a Sandra Sabatés a gloriosa protagonista trending topic de aquel día. Es cargante la transformación que está sufriendo el oficio de la comunicación televisiva. Sandra podría -debería- ser trending topic cada día. Es el contrapunto firme de Wyoming. No está pendiente todo el rato del telepromter; o al menos no da la sensación de que lo esté. Cuando aparece un invitado, Sandra tiene siempre la pregunta fina. El apunte preciso. La intervención imprescindible. Deja para su famoso partenaire el chascarrillo. Y no obstante, su exactitud de cada noche no ha merecido ser trending topic nunca. Hasta ahora. Por obra y gracia de una simple y maldita afonía.

ARTURO FERNÁNDEZ .- Ha dicho Arturo Fernández (En la tuya o en la mía, TVE-1): «Todos los obreros capaces y sagaces lo que quieren es llegar a ser burgueses». ¡Ah! Arturo cree que lo que siempre ha deseado él, lo desea todo el mundo. ¡Chatín!