Pequeño observatorio

La sorpresa de recuperar el pasado

Unos inesperados cronistas me han hecho resucitar mi primer viaje a pie al Pirineo

JOSEP MARIA ESPINÀS

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Roser Banyeres, Jaume Barrull y Jordi Rulló han publicado un libro con este título: 'El Pirineu fa 60 anys'. Es una manera de decir que ahora ha hecho 60 años de mi primer viaje a pie, que tuvo como escenario el Pallars y el Aran.

Como el libro no es un estudio crítico de aquella primera y larga caminata de mi vida, sino una recopilación de hechos y anécdotas vividos por quienes vieron pasar a aquel desconocido que era yo, ahora puedo verme desde otros ojos. ¿Cómo se puede asimilar la inesperada recuperación del pasado? Una de las cosas que me hacen saber es mi divertida ignorancia. En Can Gasset, por ejemplo, donde desayuné, pedí que me dejaran ver el famoso «xolís del visitaire». Ahora Maria Vidal, que tiene 82 años, me hace saber que entonces, cuando era joven, se puso muy colorada. Porque aquel considerable xolís estaba reservado para quien le pidiera la mano...

El viaje lo hacía con Camilo José Cela, y recuerdan que «llevaba una sahariana en la que se podían plantar coles de tan sucia como estaba». «Espinàs tampoco iba muy arreglado después de días de caminar». Había olvidado lo que los autores del libro explican: el wáter de la fonda instalado en lo alto de unas escaleras, francamente sultanesco. «Durante muchos años han venido a preguntarnos si les podíamos enseñar el inodoro del que habla Espinàs en su libro». Y es cierto que, para poder desayunar, un día tuvimos que esperar que las vacas bajaran del prado para que las ordeñase su propietario.

Ni que decir tiene que han pasado muchos años, y muchos libros de viajes, y muchas vidas, me parece, en una vida. Los inesperados cronistas me han hecho resucitar temporalmente el pasado. Y me quedo con este recuerdo: tendido cerca de una división de aguas. A la izquierda, la Ribagorça; a la derecha, el Pallars; y la vista, en el Aran. Qué suerte, en la vida, tener opciones para poder elegir.

Y gracias, amigos, por hacerme revivir el pasado.