¿Qué podemos aprender del sector privado contra la corrupción?

Seguro que los partidos podemos aprender algo de cómo el sector privado ha ido encarando el problema de la corrupción durante los últimos años.

De hecho, personalmente tengo una experiencia bastante reciente y muy clarificadora.

Estoy participando en el programa que promueve elCírculo de Empresarios denominadoEmpresas-Parlamentarios y que pretende acercar la realidad del mundo de los negocios a los legisladores; ha sido siempre una experiencia interesante, que me ha permitido conocer culturas y enfoques empresariales muy diversos.

Estas últimas semanas estoy conociendo la multinacional alemanaSiemens, una compañía tan poderosa comoAlemania.

La primera sesión de trabajo tuvo dos componentes de primer nivel. Por un lado, un encuentro bastante largo con la brillante responsable máxima de la compañía en España, Rosa Garcíay, por otro, la presentación de la política de'compliance'de la empresa , por parte de su máximo responsable.

Poca broma con los alemanes.

Siemens sufrió unenorme escándalode corrupción hace algunos años. La mayor multa de la historia de la SEC estadounidense, la caída de su valor en bolsa, la liquidación de buena parte de su dirección y la puesta en marcha de una rigurosa política interna de lucha contra la corrupción, conocida como 'compliance', que podríamos traducir como cumplimiento, fueron los resultados de esa fechoría.

Hoy Siemens tiene 600 profesionales en todo el mundo trabajando en su programa de 'compliance'.

¿Es ética? No lo dudo, pero es asumir también que los riesgos asociados a la corrupción pueden llevarse por delante una compañía tan vieja, tan decisiva y tan enorme como Siemens.

Algo podemos aprender.

Por cierto,Siemens afirma en sucódigo de conducta que renuncia a hacer donativos a los partidos políticos.

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