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El ciprés de Can Figueres, en Premià de Dalt

El árbol se alza majestuoso en el jardín del museo local, un espacio público muy agradable

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Antonio Madridejos

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Can Figueres, que actualmente acoge el museo, la biblioteca y la Casa de Cultura de Premià de Dalt, es una sobria masía medieval que a finales del siglo XIX fue transformada en lujosa residencia por parte de una familia de indianos instalados en el municipio.

Siguiendo la moda de la época, los dueños reformaron el patio y lo transformaron en un colorido jardín poblado de especies originarias de América. Hoy es un espacio público muy agradable y frecuentado. El árbol más destacado del jardín es sin duda el ciprés de Monterrey que crece junto al edificio principal, un espectacular monumento que no pasa inadvertido para el visitante.

Se trata del ejemplar más grueso de su especie en Catalunya (7,44 metros de perímetro a 1.30 m.), aunque muestra preocupantes signos de decaimiento, los efectos de un rayo y una afectación parasitaria.