Melodías de Quart Primera

El pop de Quart Primera no tiene aspecto casual y no pretende sonar fresco ni gracioso. Más bien busca conmover al oyente con melodías elaboradas, arreglos cálidos y una sentida interpretación vocal. «Soy incapaz de sonar ligero, de hacer música para una fiesta mayor. Ya de pequeño las películas que más me gustaban tenían cierta gravedad, como Gente corriente, de Robert Redford», explica el timonel del proyecto, Pere Jou, a propósito de su tercer disco, Neurones a la punta d'un iceberg, que mostrará este sábado en Music Hall (21.00 h.).

Fue precipitado situar a este grupo en aquella casilla del folk-pop, tan transitada hace unas temporadas. Total, porque tocaran guitarras acústicas... «Si folk es música tradicional, que busca las raíces, no lo hemos sido nunca», opina Jou. Con el tiempo, Quart Primera se ha ido desmaterializando, perdiendo integrantes hasta convertirse en el vehículo de este cantante, compositor y multinstrumentista, mientras, en cambio, su música se iba llenando de sonidos y matices. Tiene que ver en ello la incorporación de los miembros de Santos, que le acompañarán también en los conciertos. «Quiero seguir con ellos, como Tom Petty con The Heartbreakers», apunta con ironía.

Baúl de otros tiempos

Jou se confiesa «obseso de la melodía», y busca inspiración más allá del pop. «Me gusta la música antigua, con melodías a las que no estamos habituados. Es como música nueva encerrada en un baúl desde hace 500 años. El austríaco Biber, por ejemplo, ¡es mega-pop!», asegura el barcelonés, que es estudiante del grado superior de canto clásico (además de licenciado en Sociología y Comunicación Audiovisual) y ha sido músico de gira de Dorian y Elefantes. Sus acogedoras tramas melódicas casan con su intensa actitud vocal, con falsetes enfáticos y sensación de vivir a fondo cada estrofa. «Lo que hace que una interpretación enganche es la intención, cómo metes esas notas en el cuerpo y tú te conviertes en esa historia», señala.

¿Objetivo: atacar las fibras sensibles del oyente? «Totalmente. Yo tengo epifanías: encuentro algo y me emociono. Y con las canciones procuro decirme a mí mismo lo que necesito escuchar». Con materiales que miran hacia la tradición del pop. «Beatles, Petty, Sexsmith... Jugando con melodías que te parece que ya has oído pero que te ofrecen algo nuevo». Jou cree que la innovación «es un mito que ha hecho mucho daño», si bien, en otro campo, ha inventado una aplicación, City Soundtrack, en colaboración con el ayuntamiento, que permitirá escuchar gratuitamente menús musicales diseñados para enclaves barceloneses. «Para disfrutar de espacios, turísticos o no, de la Sagrada Família al mercado de Sants», explica con entusiasmo.