EMERGENTE

«Un escritor debe darse a conocer»

Juan Soto Ivars, la pasada semana en Barcelona.

Juan Soto Ivars, la pasada semana en Barcelona.

ELENA HEVIA
BARCELONA

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«Colgué cosas horribles en internet. Escribí por vanidad, como todo el mundo». Elmea culpalo entona Juan Soto Ivars, murciano de Águilas que se crió en Tánger , llenó un cajón con aquellos textos de los que hoy quiere olvidarse y descubrió el mundillo literario cuando estudiaba en Madrid y ejercía de vendedor en una librería de culto, por donde solía pasarse laintelligentsialocal. Alberto Olmos, amigo, le advirtió que puedes matarte por publicar tu primera novela pero que lo usual es que cuando esta está en el mercado «no pase nada, ni una mísera epifanía. Nada».

Ahora vive en Barcelona y su debutLa conjetura de Perelman, unthrillerpsicológico que fantasea sobre la figura real del misántropo ruso y genio de las matemáticas del título, viene precedida de un cierto runrún informático. Y es que hay una marejadilla entre escritores y críticos armados de blogs -Soto Ivars tiene el suyo- convertidos en plataformas para disparar descalificaciones. A él le ha acusado de establecer una cierta estrategia para lograr una visualización, algo que no niega pero minimiza: «No entiendo que se considere algo malo el que un escritor pretenda darse a conocer. No me voy a hacer rico con esta novela, lo máximo a lo que puedo aspirar es a sacar un segundo libro. Todo esto me parece exagerado». Su voluntad, teorizada en el manifiesto Nuevo drama, «es invitar a la gente que empieza a escribir a que no se sienta obligada a complicar el lenguaje».

JOVEN / Le horripila pensar que a su obra le puedan colgar la etiqueta de literatura joven. «Soy capaz de no publicar hasta que deje de serlo», amenaza. Tampoco tiene reparos frente a las historias de género, porque aprendió a amarlas en el cine. «¿Que Peckinpah hiciera westerns hacía menos personal su cine?».

Y ahí en el centro de su novela está Perelman, el hombre que solucionó la conjetura de Poincaré y hoy vive apartado de todo, matemáticas incluidas. «Me parece un gran personaje pero quería que reverberara en él el personaje de su novia, que está inspirado en una ex, una chica que «reaccionaba muy mal al silencio y a la falta de respuesta».