PRESENTACIÓN EN BCN

Un director español con 'sponsor' japonés

Diego Martín-Etxebarria, premiado en Tokio, debuta en el Palau de la Música este sábado con la Orquestra Simfònica del Vallès

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MARTA CERVERA / BARCELONA

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Un famoso concurso de dirección japonés celebrado en el 2015 puso en órbita al simpático y nada pretencioso Diego Martín-Etxebarria (Bilbao, 1979)Diego Martín-Etxebarria. Desde entonces, el solicitado director vasco no para de recibir ofertas de importantes auditorios. Este sábado debuta en el Palau de la Música al frente la Simfònica del Vallès con un concierto muy cinematogràfico. Arranca con 'Star Trek: through the Years', de Jerrry Goldsmith, sigue con la 'suite' de 'Ed Wood', de Howard Shore y 'Los planetas', de Gustave Holts. "Me gustan los programas temáticos. Este, aunque es cinematográfico, en realidad pivota sobre la idea del espacio exterior algo muy presente en los films de ciencia ficción", dice en perfecto catalán este altísimo y atlético músico. Se acostumbró desde pequeño pues veraneaba en Costa Brava. Después lo perfeccionó en la Esmuc, donde conoció a su mujer, la mezzosoprano vallesana Anna AlàsAnna Alàs.

SUEÑO HECHO REALIDAD

"No hay nadie en mi familia que sea músico" reconoce. Su vocación surgió tras ver en televisión un concierto sinfónico. "Debí de flipar con el señor de la batuta delante de tantos músicos y lo bien que sonaba". Y todavía fliparon más en la escuela municipal de Amurrio (Álava) el día primer día de clase. "Me preguntaron qué instrumento quería tocar y dije: 'Me da igual, yo quiero ser director de orquesta'". Como no conocía ningún instrumento empezó con el piano y más adelante, cuando faltaron oboístas en la banda, cambió de instrumento.

Desde hace algunos años reside en Berlín aunque viaja sin parar. Debutó profesionalmente en el 2009 con la Sinfónica del Bilbao y siempre ha compaginado la dirección de música sinfónica con la ópera. Ganar el Concurso Internacional de Dirección de Tokio ha catapultado su carrera. La repercusión de aquel premio ha sido brutal, en parte, porque llevaba la friolera de 15 años desierto. "En Japón son muy exigentes. Ganar allí me ha situado en otro nivel. La competencia entre directores es enorme y, más allá del talento, necesitas algo que te distinga. Parte de nuestro trabajo consiste en vender entradas y el certamen de Japón, uno de los más importantes junto a los de Londres, Frankfurt, Copenhague, Cadaqués y Besançon, me ha abierto muchas puertas".   

ÓPERA CATALANA

Esta temporada entre las obras que más le apetece dirigir cita 'Tempesta esvaïda', una obra lírica breve de Joaquim Serra que en marzo ofrecerá en Olot. "Es un descubrimiento, una pieza operística magnífica. La música tiene influencias de Puccini y Mascagni. No entiendo como no se toca más. Es espectacular". Si a alguien le interesa escuchar esta obra desaparecida del mapa desde hace 80 años y recuperada hace un año en Reus, puede acceder a la grabación que hizo con la Orquesta Camera Musicae, disponible en Spotify. Para abrir boca, vean el siguiente vídeo.