Un claustro recreativo

No es románico y está construido a principios del siglo XX, si está en lo cierto el último informe encargado por la Generalitat a un grupo de expertos, pero la fama que ha conseguido a raíz del debate sobre su autenticidad le ha garantizado el interés del público. La fundación de la familia propietaria del claustro de la finca del Mas del Vent de Palamós (Baix Empordà) ha anunciado que el monumento (o la recreación, si se prefiere) se abrirá al público a partir de enero. Será a través de visitas guiadas que organizará una vez al mes el Museu de la Pesca de Palamós y que se enmarcan en un ambicioso proyecto para fomentar las artes, el patrimonio cultural y la protección del territorio bajo el nombre de Focusengelhorn.

Kurt Engelhorn, descendiente del adinerado propietario que instaló el claustro en 1958, no quiso avivar la polémica sobre su origen y apuntó que su tio abuelo ya había albergado algunas «dudas» sobre su autenticidad. Aun así, insistió en que el verdadero interés de la obra es su belleza y no descartó que en el futuro puedan aparecer nuevos datos sobre la historia de las misteriosas piedras. «No tengo muy claro si mi tío abuelo sabía si era falso o no. Imagino que por lo menos tenía la duda, porque no se sabía de dónde venía ni qué había pasado con él. Se instaló en el jardín de una finca privada, estaba en un solar de Ciudad Lineal (Madrid) y no era necesario tener la certeza de que fuera un monumento auténtico», afirmó.

Protección especial

Para la familia, «lo importante es el conjunto de esta finca única, y el claustro forma parte de este sitio», explicó. Engelhorn y su esposa Carmen consideran que el hecho de que sea una recreación no tiene demasiado interés y por eso no se habían molestado en investigar, a pesar de que en los años 60 del siglo pasado ya había expertos que dudaban de su autenticidad. «Para mí, lo que es importante del claustro es el gusto estético, ya que es en sí mismo un acto artístico», afirmó el marido.

La alcaldesa de Palamós, Teresa Ferrés, que estuvo presente en la presentación de la nueva plataforma cultural, explicó que el ayuntamiento está a la espera que la Generalitat decida si va a dar una protección especial a la obra. De no ser así, el consistorio no descarta declararlo bien cultural de interés local porque consideran que es «importante» para el municipio.

Las visitas al claustro se extenderán a toda la finca del Mas del Vent y también se ofrecerá otro recorrido guiado por la bodega Bell-lloc, parte de la cual se reconvertirá en un espacio para exposiciones temporales, que en su primera etapa contará con obras del cineasta Albert Serra, los músicos Marcel·lí Antúnez y Natxo Tarrés, el fotógrafo Francesc Guillamet y los artistas Kiku Mistu, Xavier Escribà y Xavier Medina-Campeny.