The Pinker Tones, cántame un cuento

The Pinker Tones cerró en el resurgido Canet Rock el paréntesis a sus 10 años de reconocida e internacional trayectoria como abanderado grupo de música electrónica. Fue la banda que cerró el festival, con un injusto retraso horario (salió sobre las nueve de la mañana), pero con una entrega total. Ahora, el trío barcelonés vuelca su creatividad, que es mucha, en otro formato: el libro-disco infantil. Tras el éxito de 'Rolf & Flor' publica 'Rolf & Flor en el Círculo Polar', lo que le coloca de nuevo en las estanterías y en los escenarios (con disfraces incluidos). También escribe y canta en inglés y castellano. Y las ilustraciones las firma Miguel Gallardo.

"El primer libro nació a modo de anécdota, fruto de las ganas de hacer algo para los niños. La historia se nos quedó corta para una sola obra. Y en esta segunda hay un trabajo de desarrollo de los personajes principales y de los secundarios, como es el caso de Arason, el monitor", explica Mister Furia (Salva  Rey). Precisamente la voz de este Arason en cuestión la pone ni más ni menos que Moreno Veloso (sí, el hijo del mítico Caetano Veloso).

Todo está conectado

"Moreno y su banda (Kassin y Domenico) hicieron un remix de una de nuestras canciones, 'Pink Freud', para el disco 'More colours'. Esa fue nuestra primera conexión con él -relata Professor Manso (Àlex Llovet)-. Y luego nosotros hicimos un remix para Kassim. Desde entonces, surgió una bonita amistad. Y cuando buscamos una voz para Arason, un tío muy grande, pensamos en Veloso, que al ser brasileño le aporta el toque exótico". 

"En realidad, su gran ilusión es la biología. Cuando vino a Barcelona, se quiso acostar pronto para irse al día siguiente a andar por Montserrat. Y como su canción habla del círculo simbiótico, de que en el bosque todo está conectado, vimos que era la persona ideal", añade Mister Furia.

Otro músico invitado es Landry, el rumbero, que al final del disco canta animado: "Cuando la pena queremos olvidar, en Barcelona nos gusta cantar". "En este segundo libro está el personaje del niño conflictivo, que se niega a ser feliz. Y qué mejor que una rumba para este momento de exorcismo del mal rollo", explica el vocalista, antes de disfrazarse de Mario, el heladero. Y de esta guisa (no había manera de que el bigote quedara recto), cantó en acústico el tema 'Mario'.