MUNDIAL DE MOTOCICLISMO

Jorge Lorenzo, el superviviente

El campeón de MotoGP nunca ha olvidado a quienes le ayudaron, aunque con la mayoría haya tenido rupturas desagradables

Jorge Lorenzo, campeón de MotoGP por tercera vez, concentrado en Cheste

Jorge Lorenzo, campeón de MotoGP por tercera vez, concentrado en Cheste / periodico

EMILIO PÉREZ DE ROZAS / CHESTE

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Ya no queda casi nada de aquel niño rebelde. Bueno, sí, quedan las ganas de seguir siendo duro, invencible, pétreo, sincero, honesto, indestructible. Este Jorge Lorenzo ( 4 mayo de 1987, Palma) es, sin duda, fruto de toda aquella dureza, la que le imprimió, la que soldó a su cuerpo, su padre, 'Chicho' Lorenzo, que lo machaba a entrenamientos y disciplina en los párkings de los supermercados de toda la isla.

Lorenzo nunca ha olvidado a los que le ayudaron, ni siquiera a aquellos que, al final, provocaron con su comportamiento una ruptura desagradable. Porque, si algo es el flamante campeón de MotoGP, es un auténtico superviviente. De la vida y de las carreras. Llegado a este momento, coronado por tercera vez, algo inmenso, algo enorme, sigue solo pero con una fe inmensa en sus posibilidades. Fruto de ello ha sido esta conquista, pues jamás dejó de creer.

Sus referentes

Cuando le preguntan de quién se acuerda ahora, dice que “de papá ‘Chicho’, de Giampiero Sacchi, de Dani Amatriain, de Marcos Hirsch y, cómo no, de Lin Jarvis". "Confió ciegamente en mí y me fichó para Yamaha, que siempre me ha dado la mejor moto y a mis fans, que entienden mis virtudes y entienden y son comprensivos con mis defectos”, añade.

Papá no solo le enseñó todos los trucos para correr, también ha estado siempre a su lado, justo cuando él precisaba de su ayuda en los momentos críticos, en aquellos instantes que dudaba o precisaba repasar algunas lecciones. Sacchi, como recuerda con agrado el mallorquín, fue quien le acogió en Derbi y quien le enseñó, como poco, a dar los buenos días cuando entraba en su box. “De lo contrario no te subirás a la moto”, le advirtió.

La aparición de Amatriain, aunque luego se cumplicase todo, fue importantísima en la vida y carrera de Lorenzo, pues llegó a convertirse, en Barcelona, en su segundo padre. Con él conquistó el título de 250cc y proyectó todo su poder en el MundialHirsch, con quien tampoco acabó muy bien, fue más bien un gurú, que le ayudó en momentos complicados. Y, finalmente, el británico Jarvis, que lo fichó para Yamaha en contra de la opinión, ¡vaya que sí!, del mismísimo Valentino Rossi.

Juanito Llancà, el más feliz

“Esto no se acaba aquí”, cuenta eufórico Juanito Llançà, su mecánico de confianza y, sin duda, el hombre más feliz, con diferencia, de todo el circuito. No hay nadie, nadie, más feliz este domingo en Cheste, en Valencia, en España, en el mundo, que Llançà, el hombre que lleva tatuado todo su cuerpo con cosas de Jorge. “Y no acaba aquí, porque Jorge es muy activo, espontáneo, impulsivo, sacrificado, muy, muy profesional y se lo pasa bien encima de la moto”, dice. Llançà también coincide en que este muchacho, ya tricampeón, “es un auténtico superviviente de la vida”.

Lorenzo, que tuvo que esperar a cumplir los 15 años en el 2002 para poder debutar en el Mundial, ha contado nada más bajarse del podio que al ganar su primer título mundial de 250cc (2006) pensó que ya podía morirse tranquilo “que ya lo había hecho todo en esta vida”. Pero tras la mayor conquista que piloto alguno puede lograr, aseguró que trabajará duro para que “esto se repita otra vez”. Y alguien le recordó su frase del 2010, cuando ganó su primer cetro de la categoría ‘reina’ y le preguntaron si estábamos ante la ‘era Lorenzo’: “Hay que seguir empujando, amigo, ahora más que nunca. Si no sigues con la mirada del tigre, te comen los otros tigres”.

Por delante de los tigres y del rey león

Ha conseguido su última gesta, no solo ante los más fieros tigres, sino frente al auténtico rey león de la manada, que no es otro que Rossi, el auténtico icono de su deporte, el piloto más laureado de las últimas décadas y aquel al que todos señalan como el maestro de todos ellos. Lorenzo no solo ha derrotado a Rossi, también se ha impuesto ante el piloto más precoz de la historia, el catalán Marc Márquez, el campeón más joven de la categoría reina (antes lo era el norteamericano Freddie Spencer) y también, sí, el bicampeón más joven (lo era el británico Mike Hailwood). 

Ficha:

Nacido en Palma, el 4 de mayo de 1987

Debutó en el Mundial en el GP de España (Jerez) del 2002 (125cc)

Primera victoria: Río de Janeiro 2003 (125cc)

Grandes premios disputados: 231

Victorias: 61

Podios: 135

‘Poles positions’: 61

Vueltas rápidas: 32

Títulos mundiales: 2006 y 2007 (250cc); 2010, 2012 y 2015 (MotoGP)