Las emociones enriquecen

No siempre es buen momento para comprar, consumir o experimentar los servicios que ofrece una compañía, por mucho que nos convenga su oferta. El cansancio, la tristeza o el estrés son importantes palos en las ruedas de los comerciantes. Aunque SEKG, tienen una herramienta para compensarlo.

Karim Ennakhli y Aleix Canals son los fundadores de esta start-up concebida en la Universitat Politècnica de Catalunya. Se trata de dos informáticos titulados en la UPC que comercializan la captura y el análisis de las emociones para convertirlos en datos y ponerlos al servicio de empresas que pueden llegar mejor a sus clientes.

«A través de una serie de sensores que leen niveles biométricos sobre la respuesta del organismo. Ya están en el mercado, como las pulseras que miden la sudoración. Así detectamos picos de estrés o euforia emocional en determinadas situaciones, como puede ser el momento de cerrar una compra en una plataforma de e-commerce, o al abrir un regalo», explica Aleix Canals.

«Los resultados de evaluar cómo se siente cada persona en diferentes situaciones es información muy útil para que las empresas aprendan si lo están haciendo bien o si algún punto en la cadena de venta está provocando estrés al potencial cliente y, por tanto que pueda abortar su compra», añade Canals.

La idea de negocio de Canals y Ennakhli, les llevó adherirse al proyecto UPC Innova. «Allí nos ayudaron a hacer el plan de empresa y, con él, nos invitaron a participar del programa acelerador de start-ups. Después de tres meses de trabajo, los 20.000 euros que recogimos entre familia, amigos y de nuestro bolsillo como fundadores, nos permitió nacer como empresa en febrero de este año», declara el Canals.

Para estos emprendedores, crecer vinculados a la UPC los conecta con programas que estimulan la consolidación y expansión de su negocio, como el que les llevará al Mobile World Congress para presentar su potencial al mundo.