El resultado final de las elecciones en Irán confirma el golpe de mano de los reformistas

Tres días después, las autoridades de Irán ya han hecho públicos los resultados de las elecciones legislativas. De los 290 escaños del Maylis (Parlamento iraní), al final, los conservadores de la Coalición Principalista han obetido 103 escaños, mientras que los moderados de la Coalición Inclusiva de Reformistas, partidarios de la política de deshielo del presidente, Hasán Rohani, han logrado 95, según anunció el ministro del Interior, Rahmani Fazli. Otros 14 escaños han ido a parar a manos de candidatos considerados independientes, aunque a muchos de ellos se les ubica cerca de los reformistas. Quedan por asignar 69 escaños que serán elegidos en abril en una segunda vuelta pues ningún aspirante ha logrado el número suficiente de votos.

El resultado es que ni conservadores ni reformistas obtienen la mayoría absoluta. No obstante, el resultado es un éxito para los reformistas, ya que han pasado de representar menos del 10% de la Asamblea, ha controlar casi la mitad. Además, el hecho de que esa línea política haya arrasado en Teherán, donde han logrado los 30 escaños en juego, y que destacados diputados ultraconservadores del Parlamento saliento no hayan logrado escaño, convierte al bando reformista en el dominador del Maylis. El resultado de los comicios refuerza al presidente Rohani en su apuesta por el deshielo con Occidente y la apertura económica.

La presencia de mujeres también aumenta en el Parlamento, donde se ha pasado de nueve a 14 diputadas.

UN PAPEL RELEVANTE

Además, en las elecciones a la Asamblea de Expertos, el órgano de clérigos encargado de elegir al líder supremo, el cargo con más poder de Irán -muy por encima del presidente-, los reformistas también han arrasado en Teherán, donde había 16 de los 88 puestos en juego, eliminando a los principales pesos pesados conservadores. La avanzada edad y la frágil salud del actual líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, adalid de la línea más conservadora, hace pensar que ese órgano va a jugar en los próximos años un papel relevante. 

"Estas elecciones suponen un punto de inflexión en la historia de la República Islámica", señaló en su editorial el diario reformista Mardomsalari. "La gran conquista de estas elecciones es el regreso de los reformistas al sistema político. Ya no podrán llamarlos ni secesionistas ni infiltrados", señaló el editorial.