DECLARACIONES A 'LE MONDE'

Manuel Valls: "Mi Gobierno no creará un Guantánamo a la francesa"

El primer ministro francés admite "fallos" judiciales en la lucha antiyihadista, pero considera "inaceptable" encarcelar a individuos por meras sospechas

Valls (izquierda) junto al ministro de Interior, Bernard Cazeneuve, a su llegada a la catedral de Notre Dame, en París, el 27 de julio.

Valls (izquierda) junto al ministro de Interior, Bernard Cazeneuve, a su llegada a la catedral de Notre Dame, en París, el 27 de julio. / periodico

IRENE CASADO SÁNCHEZ / PARÍS

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El Gobierno de François Hollande se enfrenta, desde hace semanas, a un aluvión de críticas. El atentado de Niza, cometido el pasado 14 de julio, y la barbarie perpetrada en la población normanda de Saint-Etienne-du-Rouvray, han puesto en entredicho la eficacia del estado de emergencia y el trabajo de los servicios de inteligencia de Francia.

En este contexto, el primer ministro francés, Manuel Valls, no ha tenido más remedio que dar explicaciones. En una entrevista concedida al diario 'Le Monde', Valls ha reconocido que la puesta en libertad de Adel Kermiche, uno de los dos protagonistas del último atentado que ha sacudido a Francia, fue “un fallo” judicial y “es necesario reconocerlo”.

Adel Kermiche, de 19 años, fue condenado en el 2015 tras intentar, en dos ocasiones, viajar a Siria para unirse a las filas del autodenominado Estado Islámico (EI). Sin embargo, fue puesto en libertad, con asignación a domicilio y controlado con un brazalete electrónico, el pasado mes de marzo. Una decisión, explica Valls, “ordenada en primera instancia por un juez de instrucción especializado en yihadismo, y confirmada por un tribunal de apelación formado por tres magistrados, también con experiencia”.

DEFENSA DEL ESTADO DE DERECHO

Un fallo que continúa alentando la polémica y alimentando las críticas de la oposición. Una oposición, encabezada por Los Republicanos y el Frente Nacional, que acusa al Ejecutivo de Hollande de abanderar una política demasiado laxa frente a la amenaza terrorista. Para el primer ministro, solo existe una línea infranqueable: “el Estado de derecho”. Un Estado de derecho en el que sería inadmisible encarcelar a sospechosos: "La encarcelación de individuos por una simple sospecha es moralmente y jurídicamente inaceptable”.

Así, Valls ha asegurado que no será su Gobierno “quien creará un Guantánamo a la francesa”. Toda una declaración de principios para rechazar públicamente la propuesta de Nicolas Sarkozy, líder de Los Republicanos, de “salir” del marco jurídico actual, estimando que frente a la “barbarie”, “la izquierda está paralizada”.

CREACIÓN DE UNA GUARDIA NACIONAL

Ante la polémica, el miedo generalizado y una amenaza terrorista constante, François Hollande asegura que Francia combatirá al EI “por todos los medios”. La prolongación del estado de emergencia, instaurado tras los atentados del pasado día 13 de noviembre, no parece suficiente. La creación oficial de una Guardia Nacional ha sido la última medida propuesta por el Gobierno francés. Las reservas operativas de civiles voluntarios y militares jubilados formarán este nuevo cuerpo de seguridad. Una propuesta evocada en numerosas ocasiones, especialmente tras el atentado de Niza, y finalmente, reafirmada por Hollande.

Este cuerpo “no tiene vocación de sustituir a las fuerzas de seguridad -puntualizó Hollande el 28 de julio en su discurso en Rivesaltes, al sur de Francia-, "sino de apoyarlas y reforzarlas”. El próximo septiembre la propuesta será sometida a “la consulta de comisiones parlamentarias”, con la idea de que sea operacional “lo antes posible”. Según el Ministerio del Interior, desde el pasado 14 de julio, ya se han presentado más 250.000 voluntarios para unirse a las filas de esta nueva Guardia Nacional.

RELACIÓN CON EL ISLAM

Si bien la seguridad y la eficacia de los servicios de inteligencia se encuentra en el primer plano de la polémica, aparece también el debate sobre la radicalización, el racismo, la islamofobia o el problema de la integración.

En este contexto, Manuel Valls ha anunciado que “por un periodo a determinar, no podrá haber más financiación extranjera en la construcción de mezquitas”. El primer ministro considera que es “necesario crear una nueva relación con el islam en Francia” y que es “indispensable ser intransigente con el cuestionamiento de la laicidad, las ideologías integristas, y con todos aquellos que, bajo discursos fundamentalistas, preparan los espíritus para la violencia”.

Medidas y propuestas que tratan de acallar las dudas sobre la firmeza del Ejecutivo en su lucha contra la amenaza terrorista. Una amenaza que, a ojos de Valls, deberá ser combatida desde “el Estado de derecho”, huyendo “del miedo” y “del populismo”.

NUEVO DETENIDO POR NORMANDÍA

Una nueva persona ha sido detenida en la investigación abierta sobre el atentado del martes contra la iglesia de Saint-Etienne-du-Roubray (Normandía), mientras que otras dos han sido puestas en libertad. El último arrestado es un sirio de 20 años, demandante de asilo, cuyo pasaporte fue hallado en el domicilio de Adel Kermiche, uno de los dos autores de ese ataque, en el que murió decapitado un cura de 86 años.

Según el diario local 'La Montagne', el joven fue detenido este jueves en un centro de acogida a demandantes de Cusset, en el centro del país. Los dos liberados son la hermana de Abdel Malik Petitjean, el segundo terrorista de Normandía, y un amigo de esta, al no hallar los agentes elementos que demuestren su implicación en el caso. En total, según fuentes judiciales, permanecen retenidas tres personas que todavía están siendo interrogadas.


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