El EI ejecuta a los sirios que no respetan el ayuno del Ramadán

El Estado Islámico (EI) sigue sembrando el terror en Siria y, gracias a la difusión de sus vídeos, más allá de las fronteras del país en guerra. No hay prácticamente un día en el que los islamistas radicales no consigan sobrecoger con sus ejecuciones y este fin de semana no ha sido diferente. Ayer, el EI crucificó a seis personas por no cumplir con el ayuno del mes sagrado musulmán de Ramadán en el noreste de Siria, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Un día antes, el sábado, la organización difundía un vídeo en internet en el que mostraba el asesinato de 25 soldados sirios a manos de jóvenes, aparentemente menores, en el teatro romano de Palmira, en el centro de Siria. Un vídeo cuya autenticidad no se ha podido comprobar.

Los seis ejecutados por no cumplir las exigencias en época de Ramadán fueron colgados de la verja del cuartel de la hisba, cuerpo parapolicial del EI, en la ciudad de Al Mayadín, en el este de la provincia de Deir al Zur. Un cartel les colgaba del cuello: «un día de crucifixión y 70 latigazos por no ayunar en Ramadán».

La fuente del Observatorio Sirio de Derechos Humanos apunta que los extremistas emplean a informantes, que les avisan de quién no cumple con el ayuno, y después envían a los efectivos de la hisba para capturar a los infractores.

En la última semana, los radicales han crucificado a una treintena de personas en la provincia de Deir al Zur, sobre todo, en Al Mayadín, por esa acusación.

Público en la grada

 El vídeo de la ejecución masiva en Palmira, de más de nueve minutos, aparecen las víctimas de rodillas y en fila en el escenario del teatro romano, donde sus verdugos les disparan a la cabeza desde atrás. El asesinato se produce delante de una multitud de hombres que aparecen sentados en la platea. También hay algún niño entre el público del macabro espectáculo. En un momento del vídeo, se ve cómo los prisioneros que más tarde van a ser asesinados son sacados de sus celdas y conducidos en vehículos todoterreno hasta el teatro romano, ubicado en la zona arqueológica, en las afueras de la ciudad.

La grabación acaba con el degollamiento de otro prisionero de las fuerzas gubernamentales a manos de un yihadista adulto y con imágenes de la voladura de la prisión de Palmira.

El pasado 27 de mayo, el Observatorio Sirio de Derechos informó de la muerte de 20 efectivos del régimen de Bachar al Asad a manos de miembros de EI en el teatro romano de Palmira, aunque no precisó si los autores del asesinato eran menores.

Tres días después, según la misma oenegé, el centro penitenciario de esta localidad, símbolo de la represión del régimen, fue destruido con explosivos por los extremistas.

No es la primera vez que menores de edad son protagonistas de vídeos del EI, ya que, en dos ocasiones anteriores y con fines propagandísticos, varios niños han aparecido en grabaciones en las que supuestamente asesinaban a disparos a dos rusos y un árabe israelí acusados por los radicales de ser espías.