Donativos 'on line' para salvar vidas en el Egeo

La oenegé catalana Proactiva Open Arms, protagonista del estremecedor documental de TV-3 To Kyma. Rescat al mar Egeu, se financia solo con recursos propios, sin ninguna ayuda oficial, por lo que tuvo que abrir y aún mantiene una campaña 'on line' de recogida de donativos para poder continuar con su encomiable misión: salvar vidas de refugiados antes de que mueran ahogados en su desesperado intento por alcanzar las islas griegas desde Turquía a bordo de precarias embarcaciones.

Su actividad se inició el pasado septiembre en la isla de Lesbos, cuando sus impulsores decidieron trasladarse allí para socorrer a los refugiados que llegaban sin cesar a sus costas y evitar que perecieran ahogados en naufragios o al intentar desembarcar. Apenas contaban, dicen, con sus aletas y trajes de neopreno. Llegaron con 15.000 euros de su propio bolsillo, que invirtieron en costear los trabajos de salvamento de un mes. Con ellos lograron ayudar a unas 20 embarcaciones al día, con unas 50 personas cada una, entre ellas ancianos y niños, incluso bebés.

Óscar Camps, director de Proactiva Open Arms, lo explica en su web: "Todo empezó con unas fotos que aparecieron en redes sociales de cuatro niños ahogados en una playa. Pensamos: Si nosotros nos dedicamos a esto y lo hacemos en nuestras playas, ¿por qué allí se están muriendo y nadie les ayuda?". Y decidió viajar por su cuenta.

SITUACIONES EXTREMAS

En este 2016, gracias a la solidaridad ciudadana, la oenegé ha conseguido incorporar dos embarcaciones semirrígidas de salvamento, adecuar su equipo a las duras condiciones invernales y ampliar el número de voluntarios. Sus responsables explican que el tiempo de reacción y la seguridad son vitales en situaciones extremas como las que allí se viven.

En Lesbos, el equipo de Proactiva Open Arms cubre ahora 17 kilómetros por tierra y por mar, ayudando a los refugiados a desembarcar con seguridad. También está cubriendo la costa de Quíos, otro de los destinos de los migrantes que huyen de la guerra y la violencia en Oriente Próximo. Por desgracia, admiten, no siempre pueden salvarlos a todos, por lo que han redoblado su petición para conseguir más aportaciones económicas antes de que se les agoten los recursos. Aseguran que mientras los tengan, no abandonarán su misión: "No queremos volver y dejarlos a la deriva (...) Cuantos más recursos y materiales consigamos, más vidas podremos salvar".