Conoce a los 'Ángeles de dos ruedas', motoristas de enduro que asisten a las víctimas que han quedado aisladas por el terremoto

Las iniciativas para colaborar con las labores de rescate de víctimas del terremoto se han multiplicado en las últimas horas. Así, desde el Vaticano, el papa Francisco ha dispuesto que seis agentes de la Gendarmería, la policía vaticana, acudan a las zonas afectadas por el terremoto. Los gendarmes se unirán a los seis bomberos vaticanos que ayer partieron hacia el centro de Italia para colaborar con la Protección Civil en la búsqueda de personas entre los escombros y en la asistencia a los heridos, informó la oficina de prensa de la Santa Sede.

Los agentes de la Gendarmería llegarán a Amatrice, una de las localidades más afectadas por los daños materiales y con cerca de 200 muertos, para colaborar con la Policía italiana en la seguridad de la localidad y evitar posibles robos en las casas abandonadas por sus propietarios tras el seísmo.

Pero no son los únicos. Un grupo de motoristas de motocross está recorriendo los emplazamientos más recónditos de la zona afectada para ayudar a localizar a aquellas personas que vivían en casas aisladas cuyos caminos de acceso han quedado irreversiblemente dañas por el temblor. 

En la zona, a esos motoristas se les llama ya los 'angeles de dos ruedas', pues llegan a aquellos lugares donde ningún otro equipo de rescate es capaz de acceder. Consigo llevan víveres y medicamentos. Este jueves por la mañana, tres de los motoristas observaban un mapa militar de la zona para decidir sus próximos movimientos. "Vosotros recorred esta zona. Si hay problemas o personas necesitadas, avisad", comenta Mario Menicocci, el coordinador del grupo.

UN VEHÍCULO IMPARABLE

Ugo de Filosa, uno de sus miembros, explica que en las últimas horas han llevado comida a un anciano que estaba en una casa aislada y que la Cruz Roja le ha pedido que lleve unas medicinas de forma urgente a otra vivienda.

En realidad, Menicocci montó esta iniciativa hace ya 15 años. "Es que estaba claro. Las motos son imparables, por eso hay que ponerlas al servicio de una buena causa", dice. "Cuando el tráfico esá interrumpido, nosotros logramos pasar. Que hay un socavón en la carretera, lo rodeamos. Que se ha caído un puente, pues cruzamos el río si no es muy profundo", explica orgulloso y recuerda: "Ya hemos participado en varias operaciones de ayuda, incluida el terremoto de L'Aquila".