Por los ataques a la población

El ministro de Interior libio dimite e insta al Ejército a unirse al pueblo

Ocho embajadores de Libia en el extranjero renuncian a su cargo

AGENCIAS / Barcelona

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El ministro de Interior libio y general del Ejército, Abdul Fatah Yunis, ha anunciado su dimisión y ha instado a las fuerzas armadas a unirse al pueblo en su lucha por sus legítimas demandas, según la cadena de televisión qatarí Al Yazira.

En un comunicado que ha leído en una grabación difundida por el canal qatarí, con uniforme y sentado en la mesa de lo que parece ser su despacho, el ministro ha dicho que se une a "la revolución del 17 de febrero".

"El bombardeo contra la población civil es lo que me ha hecho unirme a la revolución, nunca imaginé que íbamos a llegar a disparar contra la gente". Yunis ha asegurado además que la Libia del líder, Muamar el Gadafi, "se ha desmoronado" y que el régimen ha "traicionado a la revolución".

Al servicio de la gente

"Expreso mi fe en las demandas del pueblo y en su legitimidad", ha dicho el general y ha subrayado que "las Fuerzas Armadas deben estar al servicio de la gente". Yunis era uno de los más estrechos colaboradores de Gadafi y formaba parte del movimiento de los entonces coroneles que, junto a él, llevaron a cabo un golpe de Estado para acceder al poder en 1969.

Su dimisión se produce después de que Gadafi afirmara en la televisión libia que no abandonará el poder y que está "dispuesto a morir en Libia" y a combatir a "las ratas que crean los disturbios" hasta la "última gota" de su sangre.

Por lo menos ocho embajadores de Libia han presentado en las últimas horas su renuncia, disconformes con la represión de las protestas populares contra el régimen de Muamar el Gadafi, ha informado la cadena catarí de televisión Al Yazira.

Jefes diplomáticos

Los diplomáticos que han dejado sus puestos son los jefes de las misiones libias en EEUU, Polonia, India, Indonesia, Australia, Malasia, Bangladés y el embajador ante la Liga Árabe, con sede en la capital egipcia. También han presentado su renuncia el número dos de Libia ante la ONU y otro diplomático de alto rango acreditado ante el Gobierno de Pekín. La cadena ha entrevistado a uno de ellos, el embajador libio en la India, Ali el Essawi, quien ha denunciado que Trípoli "está ocupada por mercenarios" y se está utilizando al Ministerio de Asuntos Exteriores "contra los libios".

"Están haciendo cosas terribles contra la gente", agrega el diplomático, refiriéndose al uso de la fuerza de la policía y del Ejército contra los participantes en las manifestaciones que estallaron el pasado 17 de febrero. "Gadafi debe renunciar para que se pare este baño de sangre. No tiene ninguna legitimidad", ha agregado el ahora exembajador libio en Nueva Delhi.

Discurso de Gadafi

En una intervención desafiante desde las ruinas de una de sus casas en Trípoli bombardeada por Estados Unidos en 1986 y convertida ahora en una especie de museo que el régimen denomina Casa de la Resistencia, Gadafi ha instado a los libios que "le amen", a hacer frente a partir de esta noche a los manifestantes.

"Hay que restituir las armas robadas inmediatamente, liberar a los elementos de las fuerzas de seguridad secuestrados", ha dicho el líder libio y, en caso contrario, y ha advertido de que anunciarán "un movimiento para limpiar Libia, casa por casa", que conducirá él mismo. "Para ese movimiento me apoyaré en millones de habitantes del desierto libio", ha amenazado Gadafi, que ha calificado a los manifestantes de "grupos de gente drogada, que atacan como las ratas las comisarías y los cuarteles".