Marruecos carga contra la deriva «odiosa» de la prensa española

La supuesta apertura política que abanderó el rey Mohamed VI cuando llegó al trono en 1999 parece haberse quebrado en solo una semana echando un cerrojazo informativo sin precedentes en el territorio del Sáhara Occidental. Tanto para los medios nacionales -que han recibido instrucciones de no atentar contra la integridad territorial del país dando voz a los enemigos-, como para la prensa española, que ha pasado de ser calificada «adversaria política». En un comunicado publicado la noche del sábado, el Gobierno marroquí acusó a los medios españoles de faltar a la verdad a la hora de informar sobre los sucesos de El Aiaún.

El ministro de Comunicación, Khalid Naciri, denunció la deriva «racista y odiosa» en la que han caído algunos medios españoles, entre los que citó a los diariosEl PaísyABC, la agencia Efe, la SER y Antena 3. Naciri argumentó sus acusaciones en una fotografía de niños palestinos muertos en Gaza que fueron presentados por error como víctimas saharauis por la agencia Efe y publicada en algunos de los medios citados. Sin tener en cuenta la rectificación posterior de esos medios y de la propia Efe, dijo: «Nos tienen muy acostumbrados desde hace mucho tiempo, sobre todo a lo que concierne a nuestro Sáhara, a unos enfoques parciales y unas faltas extremadamente graves. Está probado que no se trata de simples errores profesionales o de lecturas sesgadas de los acontecimientos».

NUEVA RUEDA DE PRENSA / Anoche, a la hora del cierre de este periódico, el ministro de Comunicación convocó una rueda de prensa para volver a la carga contra el tratamiento que los medios españoles han hecho sobre la mayor protesta registrada en el Sáhara Occidental en los 35 años de conflicto.

Marruecos expulsó ayer a dos de los tres activistas españoles que se encontraban desde hace semanas en el Aaiún. Tras varias gestiones diplomáticas entre Madrid y Rabat, Silvia García y Javier Sopeña Arias, salieron del Sáhara bajo la protección de los servicios consulares españoles, según informó el Gobierno. Con ellos voló también rumbo a Canarias el periodista francés de Radio Exteriores de RNE, Guillaume Bontoux, que aseguró que El Aaiún se encuentra en «estado de sitio».

La activista española Isabel Terrazas y Antonio Velázquez, de nacionalidad mexicana, siguen refugiados en algún punto de la periferia de la ciudad. «No saldrán del refugio hasta que su seguridad se vea garantizada», manifestó la organización pro saharaui Thwra. El Gobierno español espera que Terraza se avenga a salir también.